Una labor investigativa efectuada por el grupo de Infancia y Adolescencia de la Policía Metropolitana de Bucaramanga, puso al descubierto un aberrante caso de abuso sexual contra un niño de 13 años en Rionegro, Santander.
De acuerdo a la versión de la víctima y a los datos recopilados en medio de la investigación, se estableció que al parecer el niño era sometido a diferentes vejámenes sexuales por parte de su exmadrastra, quien, según la denuncia, lo obligaba a que sostuviera relaciones sexuales con un canino que tenían en la finca donde residía junto con su padre.
Los hechos, al parecer, se presentaban por la negativa del menor a hacer ciertas funciones y labores domésticas dentro del hogar, llevándolo a realizar este tipo de aberraciones sexuales relacionadas con la zoofilia.
Se estableció que este niño en varias oportunidades intentó quitarse la vida debido al estado emocional y las afectaciones psicológicas causadas por este lamentable hecho.
La denuncia de la progenitora y algunos familiares que se enteraron de lo ocurrido, al observar ciertos comportamientos extraños del menor, permitió poner al descubierto este hecho.
Gracias a la coordinación con la Fiscalía y del grupo Caivas, en menos de dos meses, se logró hacer efectiva la orden de captura en contra de esta mujer.
El operativo de captura de esta mujer de 41 años, se efectuó dentro de una finca ubicada en el municipio de Rionegro. Deberá responder por el delito de acceso carnal violento agravado en concurso homogéneo sucesivo.
