Rubén Jaimes Niño, un reciclador de 56 años, sufrió una muerte súbita en la mañana del lunes en plena vía pública en la carrera 15 a con calle 5 del barrio Chapinero de Bucaramanga.
Durante más de seis horas su cuerpo permaneció en el andén sin que ninguna autoridad realizara el levantamiento.
Sus familiares cubrieron su cuerpo con una sábana y adecuaron un plástico encima para evitar que los ‘curiosos’ se agolparan a observar sin respetar el dolor. Permanecieron ‘eternas horas’ cuidando, esperando poder proceder a llevarlo a una funeraria y despedirlo en cristiana sepultura.
La Secretaría de Salud se habría encargado de los trámites.