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La encontraron sumergida en una caneca de agua en Puerto Wilches

Las tensiones por las que atravesaba Florales Ortiz Aguilar en el municipio de Puerto Wilches, Santander, le generarían constantes momentos de frustración que habrían terminado por convencerla de que no había un futuro válido para ella.

‘Cegada’ por los problemas sin aparente solución encontró en una caneca azul repleta de agua la forma de terminar con su vida, mientras estaba en su vivienda en la vereda Puerto Cayumba, al finalizar la tarde del domingo.

Flor, como le dirían con afecto las personas más cercanas, habría intentado decir ‘adiós’ en ocasiones previas, según una conocida, pero esta vez no falló.

Se habría preparado para ello. Una versión indica que Ortiz Aguilar habría esperado a que Alirio, su esposo, saliera de la casa a charlar con un vecino por unos momentos, para quedar en soledad con su tristeza.

Se lanzó a la muerte

Entonces, al parecer dejó las pertenencias personales a un lado y buscó después una silla para ponerla junto al enorme recipiente, que tendría una capacidad aproximada de 55 galones.

Así, mirando desde lo alto, se habría inclinado hacia el agua para dejarse caer de cabeza, en una postura que no le permitiría regresar a tomar aire ni aunque sus reflejos se lo ‘reclamaran’.

Alirio habría regresado apenas unos siete minutos más tarde, según dijo a medios locales, y al percatarse de la situación quiso salvar a su compañera de un final atroz tumbando la caneca para sacarla rápido, pero era demasiado tarde.

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