Murió al golpearse en la cabeza con un andén en Girón

Una extraña muerte sufrió un hombre de aproximados 40 a 45 años el jueves en la noche en barrio El Poblado de Girón.
Quienes transitaban por la carrera 26 con calle 45 quedaron perplejos cuando se percataron de aquel ciudadano que se tambaleaba de un lado a otro.
Parecía que iba bajo los efectos del alcohol, se veía desorientado.
Aún así, como queriendo tomarse un sorbo de vida, entró a una tienda en la esquina de la calle 45. Allí pidió un vaso con agua, luego salió y continuó su camino en zigzag.
Pero no llegó muy lejos. Dio tres pasos, perdió el equilibrio y se desplomó. Muchos hasta se rieron, presumiendo que de lo ‘borracho’ se había caído. Lejos estaban de la verdad, porque la vida se le escapó en esa exhalación.
Entonces, al ver que no se levantaba, se preocuparon. Se le acercaron, le hablaron a ver si reaccionaba pero permanecía inmóvil. De inmediato reportaron el hecho a las autoridades.
Hombres del Cuerpo de Bomberos de Girón fueron los primeros en llegar. Ellos confirmaron que ya estaba sin signos vitales.
Aquel ciudadano cayó de su propia altura contra un andén, golpeándose en la cabeza, murió de manera instantánea.
Luego arribaron patrulleros de la Policía para acordonar la zona mientras llegaba la unidad de criminalística a la inspección técnica y el levantamiento.
Y aunque la diligencia demoró, nadie supo de quién se trataba, de dónde venía ni para dónde iba. Vestía camiseta a rayas, un jean azul claro. Muchos ‘curiosos’ detenían su paso, se asomaban a ver y echaban cruces. Pero nadie lo reconoció.
Algunos aseguraron que se trataría de un habitante de calle. El cadáver fue trasladado a Medicina Legal de Bucaramanga para esclarecer las causas del deceso y establecer su identidad.