Escenas desgarradoras se vivieron ayer en el barrio Miraflores de Barrancabermeja, donde José Gregorio Quiroga, un humilde trabajador de construcción, murió sepultado.
El muro de contención que levantaba en la parte trasera para evitar los deslizamientos se ‘le vino encima’.
José Gregorio, de 30 años, quedó a más de 3 metros de profundidad. Su clamor se escuchaba aún con la tierra encima.
Sus ayudantes trataron de auxiliarlo, pero pasados 10 minutos todo fue silencio. No se volvió a escuchar la voz del trabajador. Las esperanzas para sus conocidos ‘se esfumaban’.
El cuerpo de Bomberos de Barrancabermeja acudió al lugar para realizar el rescate.
Durante más de 3 horas hubo zozobra. Sus familiares al enterarse de lo sucedido llegaron y se aferraron a la idea de encontrarlo con vida y la noticia fue devastadora. José ya no tenía signos de vida. El llanto fue conmovedor.
¿No hizo caso?
José Gregorio ejecutaba la obra junto con otros tres trabajadores.
Al parecer, le habrían advertido que el terreno estaba húmedo por la lluvia y que no era recomendable bajar al hueco’. No habría hecho caso y minutos después ocurrió la tragedia.
Los residentes quedaron conmocionados, porque en la vivienda donde ocurrió el deslizamiento funcionaría una guardería.
José Gregorio llegó como todos los días a las 7:00 de la mañana. La obra habría comenzado hace dos días. Vivía en San Silvestre.