Ha pasado un año desde que los familiares de María Esneda García Sandoval recibieron la terrible noticia. Fue hallada sin vida dentro de su vivienda, en el barrio Las Malvinas de Barrancabermeja. No han superado el dolor y saben que nada la traerá de vuelta, pero no se dan por vencidos y piden que este caso “no se quede en la impunidad como ha ocurrido con tantos”.
Aunque de manera inicial se presumía que se trataría de una muerte accidental, tiempo después sus hijos confirmaron que se trataría de un homicidio, basados en el dictamen de Medicina Legal.
“Las autoridades no han vuelto a decir nada, ya no se nombra el caso de mi mamá. Queremos que se haga justicia y seguimos esperando el pronunciamiento, porque todo está quieto.
“Lo de mi mamá fue un homicidio y queremos que los responsables paguen por lo que hicieron”, manifestó Sandra Sajonero, hija de María Esneda, quien era madre de dos mujeres y dos hombres. Sus 5 nietos la extrañan también.
El hallazgo
María Esneda García Sandoval, de 61 años, fue hallada sin vida por unos vendedores ambulantes que guardaron sus elementos de trabajo en el inmueble de la víctima, durante varios meses.
El caso fue reportado el pasado 4 de septiembre, pasado el mediodía. El cuerpo estaba sobre la cama con golpes en la cabeza y sin ningún otro signo de violencia aparente.
Sajonero insiste en que su madre fue asesinada la noche del 3 de septiembre, teniendo en cuenta el grado de descomposición del cuerpo.
Reiteró que según el examen forense ella fue víctima de 4 golpes en la cabeza con un objeto contundente, que le causaron trauma craneoencefálico severo.
La agresión habría sido perpetrada mientras dormía, porque no hallaron signos de defensa en su cuerpo. El acta de inspección Técnica de Cadáver califica esta muerte como violenta.
“Exigimos que se agilice el proceso y se dé rápido con los responsables de este crimen. Mi mamá no merecía morir de esa forma”, manifestó su hija Sandra Sajonero,