De acuerdo con las autoridades, la finca que era acondicionada para fiestas clandestinas, era utilizada para realizar eventos después de las 10:00 de la noche. Tras el llamado de la comunidad, la Policía logró aplicar 60 comparendos.
El coronel Luis Quintero, subcomandante de la Mebuc, detalló que estas personas violaban el toque de queda. “Es importante llamar a la conciencia de toda la ciudadanía sobre la situación grave que se está viviendo con ocasión de la pandemia de COVID-19. El llamado es a la responsabilidad”.
Quintero señaló que no se pueden fomentar eventos con aglomeraciones y que pueden convertirse en focos de contagios. “Es una amenaza terrible para la salud de los santandereanos”.