El estruendo de una balacera despertó a los residentes del barrio Cabecera I etapa en Piedecuesta. Sobre las 4:11 a.m. de este 7 de octubre, entre la algarabía y los gritos, un sujeto asesinó a Samuel Carrillo Chacón, de 36 años, en plena vía pública de la carrera 17b con calle 9.
Le disparó cuatro veces: dos proyectiles en la espalda, uno en el tórax y el restante en la pierna derecha. En cuestión de segundos, la víctima se desplomó sobre el pavimento. Vecinos que presenciaron el hecho llamaron al cuadrante de la Estación de Policía de Piedecuesta para denunciar el ataque. Los uniformados llegaron al sitio y alcanzaron a trasladar a la víctima a un centro asistencial.
Aunque le prestaron los primeros auxilios, la víctima murió después de 15 minutos en medio de una reanimación mecánica. A las 4:40 de la mañana, los médicos de la Clínica Piedecuesta lo declararon muerto.
A Samuel Carrillo Chacón lo asesinaron por un hecho de intolerancia, señalaron las autoridades. Antes de que su agresor le disparara, él había ofendido verbalmente a un grupo de personas, entre ellas mujeres. Esta situación desencadenó el odio del asesino que, sin pensarlo dos veces, lo acribilló.
El general Henry Yesid Bello, comandante de la Policía Metropolitana de Bucaramanga, añadió que la víctima como el asesino habían estado hasta las 2:00 de la mañana en un establecimiento comercial.
“Estas personas habían salido aproximadamente a las 2:00 de la mañana de un establecimiento comercial en donde habían departido desde la noche del domingo. Cuando se van dirigiendo a sus casas, hay un intercambio de palabras. Al parecer, la víctima habría irrespetado al grupo de personas, entre ellas mujeres”, añadió el comandante.
Respecto al señalado asesinado, las autoridades señalaron que ya fue capturado. “Se le incauta un revólver calibre 38. En este momento se adelantan los actos investigativos y urgentes para presentarlo ante la Fiscalía General de la Nación”, informó el general Henry Yesid Bello.
De acuerdo con testigos, el hoy capturado se había escondido después de cometer el crimen. Sin embargo, la comunidad colaboró con las autoridades, quienes le hallaron un arma de fuego, con la que presuntamente habría cometido el homicidio.