En la Casa de Los Nazarenos de Girón, ubicadas en la calle 32 con carrera 24, se encuentra el cuerpo de María Angélica Moreno Rodríguez, de 28 años, quien había viajado desde Bucaramanga a México en busca de nuevas oportunidades personales y laborales.
Pero durante la madrugada del lunes 22 de abril, María Angélica murió en un accidente cuando conducía una motocicleta en San Andrés Cholula, estado de Puebla.
María Angélica había viajado hacía 15 meses al país azteca, donde residía con su padre y trabajaba en una una clínica odontológica.
Susana Rodríguez, madre de la víctima, dio a conocer a Vanguardia que el domingo 21 de abril su hija participó de una comida con ocasión de la celebración de su cumpleaños número 28. Cuando se desplazaba en una motocicleta marca Italika 150, color azul, con matrícula 14TJC4, ocurrió el siniestro.
“Iba en la moto, no se sabe qué pasó, esas vías son muy solas. Sólo sabemos que tuvo el accidente, se fue contra el orillo, le pegó al andén y se golpeó contra un árbol”, relató la progenitora.
Producto del impacto, Moreno Rodríguez sufrió fracturas así como un trauma craneoencefálico severo. A pesar de ser auxiliada por paramédicos, perdió la vida en el mismo lugar.
Medios mexicanos reseñaron la noticia e indicaron que las autoridades adelantan investigaciones.
Después de iniciar campañas en redes sociales buscando recolectar más de 20 millones de pesos para repatriar el cuerpo, los familiares de María Angélica lograron conseguir la suma.
“Queremos dar los más sinceros agradecimientos a los entes gubernamentales, comunidades religiosas, medios de comunicación, empresas, familiares, amigos, personas que replicaron el mensaje, a quienes de una u otra forma nos brindaron su apoyo económico, administrativo, moral, emocional o de cualquier índole, para que nuestra niña regresara a su patria. Ya logramos el objetivo”, indicaron sus allegados.
Desde las 2:00 p.m. de este lunes 29 de abril, el cuerpo se encuentra en velación en la Casa de Los Nazarenos en Girón, donde este martes 30 de abril se realizará el sepelio iniciando con una misa en la Basílica Menor San Juan Bautista. Luego, el féretro será llevado al Parque Memorial Tierrasanta.
María Angélica había cursado estudios de gestión empresarial en el Sena y será recordada por su alegría, humanidad y don de servicio.
