Una dolorosa tragedia, que cobró dos vidas y dejó a una persona más lesionada, se presentó hacia las 10:30 p.m. del sábado, 14 de abril, justo en el kilómetro 6 de la vía que de Bucaramanga conduce a Matanza, Santander, en el sector comprendido como Bosconia.
Por allí se desplazaban Deimer Bautista y Charlotte Rivero en una motocicleta, de matrícula CVK-53E. El hombre iba de conductor y ella de parrillera.
Por causas que son investigadas, el hombre perdió el control de su vehículo, cayendo ambos al abismo y luego a las aguas del río Suratá. La moto quedó a la orilla de la carretera.
Vanguardia conoció que una persona que se movilizaba detrás de ellos por esta misma vía se percató del accidente y tan pronto pasaron los hechos bajó a intentar rescatarlos, sufriendo una fractura en una pierna.
Este hombre también alertó a través de grupos de WhatsApp a más personas del accidente y a las mismas autoridades. Fue así que empezó a llegar la ayuda.
“Esto está muy alto, es un abismo como de 70 metros. Ya bajó un muchacho que presenció el accidente, se cayó y se partió una pierna. Necesitamos los bomberos urgentes”, eran los angustiosos mensajes.
Tanto el Cuerpo de Bomberos como la Defensa Civil, utilizando diversas herramientas de rescate, bajaron por el empinado abismo hasta llegar al punto en donde las tres víctimas.
Dudwing Alonso Villamizar, jefe de comunicaciones de la Defensa Civil, informó que tras hacer contacto con los afectados se corroboró que Charlotte Rivero ya había fallecido.
“A ella se le tomaron los signos y verificamos que lamentablemente había fallecido, por lo que los esfuerzos los concentramos en los dos lesionados, colaborando con la extracción en camillas de rescate y sacando a la superficie”, expresó el vocero de este organismo de socorro a esta redacción.
Los heridos fueron llevados de urgencia en ambulancias a la Clínica La Merced de Bucaramanga.
Pese a todo los esfuerzos, Deimer Bautista, de 38 años de edad, terminó perdiendo la vida horas después en este centro médico.
“Falleció debido a la gravedad de las lesiones que sufrió. En estos casos, además de las lesiones, influye también si las heridas se pudieron ver contaminadas por el agua del río”, añadió el vocero de la Defensa Civil.
Agentes de Criminalística de la Dirección de Tránsito de Bucaramanga se encargaron de realizar la inspección técnica de los cadáveres, así como de levantar el croquis del accidente. La comunidad que hizo presencia en la zona informó que la poca iluminación y el deteriorado estado de la vía habrían incidido en este fatal desenlace.
Del hoy occiso se conoció que residía en el barrio San Rafael, en el noroccidente de la ciudad y trabajaba como ornamentador. La mujer fallecida es de nacionalidad venezolana.
