Al Instituto de Medicina Legal de Bucaramanga fue remitido el cuerpo de José Antonio Vega Rodríguez de 58 años de edad cuyo ingreso en la entidad fue catalogado como una muerte por establecer.
Según compañeros de José Antonio, el ciclista falleció mientras participaba en una travesía de ciclomontañismo en el municipio de Piedecuesta, Santander.
“Eso fue antes de llegar a una escuela, pedimos una ambulancia y cuando llegó ya no tenía signos vitales. Son eventos que se organizan y cada ciclista va bajo su propia responsabilidad, no sabemos si hubo exceso de consumo de geles con cafeína”, señaló uno de los conocidos.
Q’hubo intentó comunicarse con los encargados del evento, pero no atendieron el llamado. No obstante, a través de un grupo de WhatsApp el organizador lamentó lo sucedido, “es una triste noticia lo que ha pasado en el día de hoy (domingo), por parte de la organización lamentamos lo sucedido, quiero aclarar que se llegó inmediatamente al sitio de la emergencia, pero pues fue un caso fulminante y el ‘capo’ no aguantó, estoy aquí con él desde que me hicieron el llamado”.
Conocidos también aseguraron que José Antonio laboraba para el sector transporte. Sus familiares en la mañana de este lunes festivo 25 de marzo adelantaban los tramites para reclamar el cuerpo.
Causas de muerte súbita en deportistas aficionados
De acuerdo con el portal médico QuirónSalud, las causas más comunes de la muerte súbita son la miocardiopatía hipertrófica y la displasia arritmogénica del ventrículo derecho. En personas mayores de 35 años, la causa más común parece ser enfermedad coronaria.
Para deportes de alto rendimiento, se recomienda antes de iniciar su práctica, una evaluación médica con electrocardiograma, ecocardiograma y una prueba de esfuerzo.
La patología cardiovascular, al igual que en la población que no practica deporte, es la causa más frecuente de muerte súbita.
La edad condiciona la prevalencia de la muerte súbita durante la actividad deportiva y en los menores de 35 años el riesgo es excepcionalmente pequeño mientras que en los mayores de 35 años el riesgo de sufrir una muerte súbita es mayor.
