El Grupo de Infancia y Adolescencia de la Policía Metropolitana de Bucaramanga se ha encargado de las investigaciones para dar con el responsable de accionar una pistola traumática que alcanzó a un pequeño futbolista.
Los hechos se presentaron durante el fin de semana en la cancha de fútbol Primero de Mayo del municipio de Girón, Santander.La información entregada por testigos fue que, al parecer, consumidores y expendedores de alucinógenos habrían tenido una riña en los alrededores del escenario deportivo en los que además se agredieron utilizando pistolas traumáticas.
Uno de los disparos impactó a un niño de 10 años que jugaba un partido en la cancha, pero con la particularidad que el menor no sitió la herida al instante.
Solo fue unos segundos después, cuando el pequeño deportista le manifestó a su entrenador que le ardía el pecho, que se percataron de lo sucedido.
El pequeño estaba sangrando y de inmediato lo trasladaron a un centro asistencial para que fuera revisado por especialistas médicos.
“El médico tan pronto vio la herida dijo que era un impacto de bala traumática y nosotros dijimos, cómo así si estaba dentro de la cancha el niño, entonces, lo primero es investigar el hecho porque la verdad es una situación increíble porque nosotros estábamos acá dentro del estadio”, manifestó Juan Estupiñán, entrenador del pequeño.
La Policía investiga
El capitán José Luis Noguera, jefe de Infancia y Adolescencia de la Policía Mebuc, aseguró que el menor se encuentra fuera de peligro y se espera dar con el responsable de este hecho que causa preocupación a los padres de familia, entrenadores y los deportistas que asisten a este escenario recreativo.
“Esperamos la denuncia de la comunidad a la línea 123 para que nos entreguen información de quién accionó esa arma de fuego. Haremos operativos en los alrededores del escenario deportivo para que este hecho no se repita”, expresó el oficial.
El proyectil de las traumáticas
Un proyectil de una pistola traumática es una esfera de goma que puede penetrar material como láminas de madera, botellas de plástico, entre otros.
En el cuerpo humano, en regiones como la cabeza, el cuello, la ingle, un ojo u otras partes sensible pueden traer consecuencias fatales.
