En audiencias es presentado a esta hora el padre biológico de un bebé de siete meses de vida que murió en extrañas circunstancias en el corregimiento de Cincelada, en Coromoro, Santander.
El hombre de 19 años de edad y una menor de 16 años eran los padres del recién nacido, que el pasado 24 de julio fue llevado al puesto de salud del corregimiento de Cincelada donde ingresó sin signos vitales.
En esa fecha mediante un comunicado, el gerente del Hospital de Coromoro, Carlos Augusto Quintero Ardila, manifestó que el cuerpo del menor quedó en custodia por parte de la Fiscalía tras activarse la ruta de protección por un posible caso de maltrato infantil.
“Se le hicieron las maniobras de reanimación, pero el niño llegó muerto. Al realizar la exploración física inicial del bebé, el personal de salud evidencia algunos hallazgos como marcas en el cuerpo, las cuales están plasmadas en la historia clínica y a disposición del ente investigador”, indicó en el comunicado Quintero Ardila.
En el reporte médico también se indicó que fue una tía del pequeño la que lo llevó hasta el centro de salud.
“El hospital también informó que el menor entró en compañía de un familiar ajeno a los padres, traído al centro de salud en una moto y nunca fue solicitado el servicio de ambulancia el cual estaba disponible. El conductor de la moto al parecer el papá del niño, quedó en cámaras de seguridad cuando llegó, dejó al menor en compañía de su familiar, y se fue del lugar, situación que fue puesta en conocimiento de las autoridades”, se expresó.
Además, se informó que el menor tenía un antecedente a considerar, como fue la fractura del fémur a sus 2 meses de edad, situación que también es investigada por las autoridades dentro del proceso.
Por estos hechos fue capturado por la Fiscalía el padre biológico y se espera en las próximas horas más información sobre su participación en el deceso de su hijo recién nacido.
