Todo hasta que en la carrera 18 con calle 50 del Centro de la ciudad fue requerido por la Policía para un registro y control.
Al ver a los uniformados, emprendió la huida del lugar y terminó siendo alcanzado cuadras adelante.
Tan pronto le verificaron con su documento de identidad los antecedentes, salió reportada la medida de aseguramiento domiciliaria que estaba evadiendo.
Además de esto, llevaba consigo tres celulares, avaluados en $2 millones. Los teléfonos figuraban como hurtados en las bases de datos oficiales.
Con todas estas evidencias, fue capturado enseguida y los celulares terminaron siendo incautados.
Quedó a disposición de la Fiscalía General de la Nación por los delitos de fuga de presos y receptación.
“Invitamos a la comunidad a hacer parte de la red de participación cívica y denunciar a la línea de emergencia 123 cualquier hecho delictivo o que afecte su tranquilidad”, expresó la Policía.