Los familiares de Luis Fernando Paredes Matos, de 52 años, no salen de la consternación por la muerte del ciudadano venezolano que había llegado hace 8 años a Colombia a laborar en una finca cafetera en el municipio de Valle de San José, Santander.
De su comportamiento no existían reproches y lo consideraban un excelente trabajador.
Pero el pasado domingo recibió una brutal golpiza con palos, garrotes y botellas, por tres hombres también de nacionalidad venezolana. El miércoles, por la gravedad de los traumas, falleció en el Hospital Internacional de Colombia ubicado en Piedecuesta.
De acuerdo con el relato de sus familiares, el pasado domingo a las 4:00 de la tarde, se encontraba tomando cerveza con unos sobrinos en una tienda en zona rural del Valle de San José, pero allí también estaban sus agresores. Las causas por las que minutos después lo golpearon de manera salvaje son desconocidas. Esperaron a que saliera del negocio.
“Terminó de compartir en la tienda con sus sobrinos e iba para la finca a descansar, pero cuando iba por el camino, tres hombres lo atacaron con palos, garrotes y hasta con botellas de cerveza, le dieron para matarlo y así fue”, relató un familiar.
Según lo que se ha conocido hasta ahora, los sujetos le propinaron varios golpes en la cabeza que lo dejaron inconsciente en el suelo. Al lugar llegaron sus conocidos y casi agonizante lo trasladaron en un vehículo particular a un centro asistencial de San Gil. Por la gravedad de las heridas fue remitido en una ambulancia al Hospital Internacional de Colombia, HIC.
“Estamos sorprendidos por lo que pasó. El llevaba mucho tiempo trabajando en esa finca y no le conocíamos problemas, todo el mundo lo reconocía por ser una buena persona. Sabemos que quienes lo golpearon eran compañeros de la misma finca y también eran venezolanos, pero desconocemos el porqué”, agregó uno de sus seres queridos.
En el HIC permaneció en una Unidad de Cuidados Intensivos, pero el día miércoles su cuerpo no resistió y falleció por los fuertes golpes, en especial por los traumas en la cabeza.
Luis Fernando era padre de seis hijos, tres de los cuales vivían con él en Colombia. Sus familiares aseguraron que ya interpusieron la denuncia ante la Fiscalía para dar con los responsables que están identificados, pero huyeron de la zona después de la fuerte golpiza.
El cuerpo fue trasladado por el CTI de la Fiscalía a Medicina Legal de Bucaramanga como una muerte por establecer. Su sepelio será en la población’.
El caso ha llamado la atención porque se presentó en una de las zonas más apacibles de Santander donde en los primeros meses del año 2023 no se habían registrado homicidios.
“Ya dispusimos de investigadores para esclarecer lo sucedido. Esperamos contar con la colaboración ciudadana, cualquier dato a la línea 123”, indicó una fuente policial.
