Eran cerca de las 7:00 p.m. del lunes cuando la víctima, un estudiante de la Institución Educativa Rural Bosconia, se movilizaba al mando de una motocicleta Bóxer Platino, de placa UTR-07A, color azul, por la vía que del norte de Bucaramanga conduce al municipio de Matanza.
El menor de edad se dirigía a su vivienda en la vereda Bolarquí y a la altura del kilómetro 3 del corredor vial (metros adelanta del barrio Los Ángeles), justo en donde está Fuerte Norte de Carabineros, se encontró con una camión turbo, de matricula WON-048 y de color blanco, que iba en sentido contrario.
En hechos que son investigados, la motocicleta en la que iba el adolescente chocó por el costado izquierdo del vehículo pesado. El golpazo dejó al joven tendido bocabajo, al tiempo que la sangre en el pavimento empezaba a anunciar la tragedia.
Al lugar llegaron paramédicos en ambulancia a intentar hacer lo posible por salvarlo. Pese a todos los esfuerzos, nada se pudo hacer, se confirmó que no tenía signos vitales.
“Llegué al lugar de los hechos y ya estaba muerto, el mismo golpe en la cabeza lo dejó sin vida de inmediato”, dijo un amigo de la víctima.
Sólo restó que la Unidad Móvil de Criminalística de la Dirección de Tránsito hiciera el levantamiento del cadáver y el croquis del accidente para dar lugar a la investigación que ahora se adelantará.
“Quería ser médico”
El joven de 16 años este año iba a obtener su título como bachiller y dentro de su proyecto de vida estaba seguir formándose como profesional para ayudar a los suyos.
“Él nunca se metía con nada, evitaba los problemas (…) Era un buen estudiante y siempre nos decía que nunca iba a dejar sola a la mamá, que iba a salir adelante por ella y darle una vida mejor. Quería estudiar medicina, no se le dio porque la muerte se le atravesó”, dijo el amigo
El hoy fallecido vivía en el sector rural antes mencionado con su progenitora y sus dos hermanos.
Todos sus seres queridos lamentaban su pronta partida de este mundo.
“Ya solo nos queda pedirle a mi Dios que lo tenga en su santa gloria. Era mi parcero, mi hermano y que nos dé mucha fortaleza”, concluyó el allegado con un dejo de tristeza.