Fred Alonso Ruiz es el líder de la Defensa Civil que junto a seis miembros más de esta institución han recorrido sin descanso el caño Peruétano sin hallar el pequeño cuerpo del bebé de seis meses de vida que cayó a sus aguas.
El caño es un brazo del río Magdalena, un espejo de agua extenso que se encuentra entre los municipios de Sabana de Torres, Puerto Wilches y limita con el municipio de San Pablo en el Sur de Bolívar.
La tragedia para una familia campesina de esa región de Santander se presentó el pasado domingo cuando regresaban a su finca Las Galias, en una canoa con motor después de participar en un evento deportivo.
“Iban el papá, la mamá, un menor de tres años y el pequeño de seis meses. Era tarde de la noche del domingo y la embarcación sufrió una fisura, empezó a entrar el agua y se hundió”, relató Fred Ruiz.
Según lo manifestado por los padres, los cuatros cayeron al agua. La mamá alcanzó a rescatar a su hijo de tres años, pero el bebé de seis meses se le soltó de los brazos y fue arrastrado por la corriente. La oscuridad de esa hora de la noche también contribuyó para que el niño desapareciera.
“El punto donde cayó el pequeño tiene una profundidad de más de 10 metros. Hemos hecho inmersión a pulmón, pero necesitábamos el apoyo de buzos. En las últimas horas se nos unió el equipo de Ponalsar que nos permitirá ver si está en el fondo del caño”.
La Unidad de Operaciones Especiales en Emergencias y Desastres de la Policía, Ponalsar, llegó con buzos para sumergirse en las aguas de la ciénaga e intentar localizar el cuerpo del bebé.
De igual manera se trabaja con drones recorriendo el espejo de agua para tener alguna señal que lo permita ubicar.
“Todas la esperanzas están en hallarlo pronto. Es un cuerpo muy frágil que podría descomponerse muy rápido. Además debemos tener en cuenta factores como la fauna silvestre, peces y la presencia de babillas o caimanes. No descansaremos y haremos lo humanamente posible por encontrarlo y que su familia pueda descansar”, indicó el funcionario de la Defensa Civil.
Por ahora han contado con el apoyo de la Oficina de Gestión del Riesgo de Sabana de Torres, pero esperan la colaboración de otras entidades a nivel departamental y nacional.