Ha pasado casi una semana del incendio que se registró en un taller de latonería y pintura en la Transversal Oriental, en el barrio El Carmen, y el propietario del lugar se resigna a cerrar su negocio con el que ha sacado adelante a su familia.
Las pérdidas superan los 60 millones de pesos ya que las llamas consumieron el chasis de varios vehículos, herramientas y otros equipos que usaba en el lugar donde trabajaba con varios empleados que también se quedaron sin trabajo.
El dueño del taller es Juan Carlos Riaño, un hombre de 43 años, que lleva 22 años en este oficio y hace 10 se instaló en esta zona de Floridablanca en un lote conjunto a una estación de servicio.
Según su versión, las llamas comenzaron por culpa de un habitante de calle, que es conocido con el alias de ‘Chirilo’ que acostumbra a hacer fogatas para calentar sus alimentos.
“El Jueves Santo como a las tres de la tarde el vigilante del taller me informó de la presencia del sujeto que iba a cocinar una sopa o algo así. Lo hizo justo debajo de unos bambúes, que las hojas secas facilitaron la propagación de las llamas hacia el taller”, indicó Juan Carlos.
En el sector se generó el pánico ya que el negocio limita con una estación de servicio. Por fortuna la rápida acción de los Bomberos de Floridablanca logró controlar y apagar las llamas.
“Acudimos con varias máquinas y logramos controlarlo. Trabajamos de manera ágil y no se propagó a la estación de servicio, ya las causas quedan en manos de las autoridades”, indicó una fuente de Bomberos.
Pero el taller sí quedó en cenizas y los años de trabajo se perdieron para el hogar de Juan Carlos quien gracias a este oficio ha sacado adelante a su esposa y a sus tres hijos.
“Ya le habíamos advertido a la Policía sobre la actitud del habitante de calle que de manera constante prendía las fogatas. Y el peligro es la estación que queda cerca. Esperemos que se tomen cartas en el asunto ahora que lo perdí todo”.
Con la ayuda de algunos amigos y familiares ha buscado la forma de obtener recursos a través de rifas para intentar recuperar su negocio, “es triste perder el esfuerzo de toda una vida por una acto irresponsable de otra persona”.
