Al Hospital del Norte tuvieron que trasladar a Oscar Emilio Claro Arévalo, un taxista a quien atacaron con arma blanca en el barrio Colorados, por oponerse a entregar el fruto de su trabajo.
Ocurrió el jueves a las 7:30 de la mañana en la vía La Cemento, frente el Motel de Los Faraones.
Oscar llegó malherido hasta la estación de Policía pidiendo ayuda. Tenía dos cortadas profundas en ambos brazos.
Dijo que un sujeto lo atacó con un arma blanca para exigirle que le entregara el producido. Claro opuso resistencia al robo, forcejeó con aquel delincuente hasta que le asestó las puñaladas y huyó.
A pesar de las graves heridas, el taxista fue estabilizado y se recupera de manera satisfactoria mientras la Policía, con la descripción que dio el conductor, buscan al autor de este nuevo asalto contra un conductor de servicio público.
Ningún ‘amarillo’ quiere ir por allá
En menos de una semana tres taxistas han sido víctimas de hurto; algunos como Oscar Emilio, heridos con armas blancas por resistirse.
La situación es alarmante para el gremio, según manifiestan, pues ante el cese de actividades por las jornadas de paro, el trabajo escasea y viven atemorizados de que lo ‘poco’ que logran trabajar en el día, se les ‘esfume’ por cuenta de bandidos que atentan contra sus vidas.
“La modalidad que tienen para robar es decir que tienen un billete grande, les preguntan a los conductores si tienen sencillo. Si uno cae en las trampa con ellos, ahí saben que ya lleva más de 50 mil pesos”, señaló Luis Eduardo Pimiento, líder del gremio.
Pimiento indicó que ante la inseguridad muchos ya no quieren realizar servicios hacia sectores como La Cumbre y El Reposo -en Floridablanca-, así como a Colorados, en Bucaramanga y en general, todo el Norte.
“Teníamos un sistema que se llamaba control del pánico por el cual alertamos a la Policía del cuadrante y a los puestos de control si algún compañero iba en peligro, pero necesitamos más control y apoyo para seguridad de los taxistas”.