Entre 1989 y 1990 se realizó la venta de cientos de lotes ubicados al final de la carrera 10 del Norte de Bucaramanga y tan pronto como se compraron, así se comenzó a la construcción de casas cuyo único requisito arquitectónico era tener un balcón. Así es como nació el barrio Balcones de Kennedy.
Dividido en seis manzanas (de la A a la F), el sector se construyó como si escalones se tratara porque cada casa posee una inclinación distinta. La primera persona que habló de construir un barrio en la zona fue Miguel Gracía Herreros. Enamorado del proyecto buscó apoyo político para alzar las viviendas y construir un alcantarillado.
Cada uno de los escalones y las calles peatonales fueron construidos por los propios habitantes, quienes se animaron a poblar el naciente terreno cuando ya quedaron listas las primeras tres casas.
Una de las personas que se animaron a mudarse al ‘barrio de los balcones’ es María Teresa Flórez. Ella recuerda que “cuando vimos que esto ya no era un barracal ni un montón de ‘palos’, nos mudamos acá y cada fin de semana trabajábamos en la construcción de la casa”.
Así como Flórez, múltiples de los fundadores del barrio arribaron a inicios de los 90´s. En sus 35 años de historia se logró la pavimentación de su vía principal y la construcción y posterior cerramiento de la cancha de fútbol. Eso sí, el gobernador de la época, Hugo Aguilar Naranjo le quedó debiendo a la comunidad la gramilla sintética que había prometido.
El edil más longevo
Uno de los miembros fundadores más destacados es Luis Eduardo Sánchez Bueno. Son 344 votos los que le otorgaron por segunda vez el cargo de edil de la comuna 1 a sus 84 años.
Gran parte de su vida la dedicó a dos grandes causas: la construcción y progreso de ‘los balcones’ y la venta de lotería por las calles de ‘la bonita’. En sus palabras explica el porqué de su postulación: “tomé este cargo porque quiero que la administración municipal y la gobernación vuelvan a poner los ojos en este lugar. Tenemos muchas necesidades y quiero que volvamos a tener ese progreso que alguna vez tuvimos”.
Con el paso del tiempo y los alcaldes, el pequeño barrio lleno de ‘balconcitos’ en la comuna 1 de Bucaramanga sigue siendo un lugar sinónimo de progreso. Sólo falta una mano amiga e inversión.
El calzado es una gran fuente de empleo
Con 20 años de presencia en el barrio, Margarita Gómez es una de las emprendedoras más destacadas con su taller de calzado infantil, Topositos. Son 30 empleos directos y 5 indirectos los que genera el sector del calzado en la zona. Las manos de hombres y mujeres que ‘camellan’ de sol a sol en el taller han realizado un producto que hasta en Bogotá desean contar con buena parte del producto.
La calidad está en el detalle
Roselia Gómez es la dueña de la miscelánea del barrio. En sus vitrinas se exhiben desde ganchos y dulces hasta anillos y aretes que rondan precios desde los 3.500 hasta los 22.000 pesos. ‘Rosy’ cuenta con una década de presencia en el sector y se consigue “de todo un poquito, pero bonito” como diría la amable comerciante.
Una tienda dedicada al ‘bicho’
En la calle 27N #4A-47 se asoma un letrero particular: Micromercado CR7. La persona que bautizó el local en honor al futbolista portugués, Cristiano Ronaldo, fue un pequeño de 7 años. Matías Cepeda con orgullo dice que su mamá, Andrea Estevez, le dejó darle el particular nombre a la tienda que ya cumple 7 años.
Todos los días a partir de las 7:00 de la mañana se abren las puertas del negocio y además de Andrea, Johana Ramírez y Wendy Salazár son las otras dos colaboradoras que atienden a los vecinos.
Transporte
Por toda la vía principal pasan las rutas Inem, Betania y Hamacas de las empresas Cotrander y Transcolombia, los habitantes del sector se sienten satisfechos con el servicio que presta, ya que cada 5 minutos se ve un bus subiendo o bajando. Los trayectos comunican con el centro de la ciudad.
Seguridad
Las seis manzanas peatonales del barrio cuentan con un sistema de seguridad interno compuesto por 8 cámaras que vigilan las 24 horas del día y 8 cornetas las cuales ya no funcionan. Es preocupante la falta de mantenimiento de los equipos dedicados a impartir orden en el sector.
Educación
A menos de 10 minutos a pie se encuentra el Instituto Educativa Maiporé, las tres sedes se encuentran en un rango cercano. Además, los residentes del sector tienen un buen concepto de la educación impartida en los tres centros. También otra parte de los niños estudia en el Inem Custodio García Rovira.
Salud
El barrio Balcones de Kennedy está cerca al Hospital Local del Norte porque los separa menos de un kilómetro. Además, la atención en el centro médico es óptima y ante cualquier emergencia la atención es lo suficientemente rápida. Además, dentro del sector hay gran variedad de tiendas con medicamentos.
Vías
La malla vial es favorable para los vehículos en la mayoría de las cuadras, pero eso no quita la gran cantidad de ‘cráteres’ que se asoman en la vía por donde suben y bajan los buses de transporte público. La comunidad sigue a la espera de un proyecto que le genere conexión con la vía a Betania con el fin de abandonar vías alternas que ponen en peligro a los conductores.
Fotos y redacción: Felipe Jaimes Lagos.
