La niña recién nacida y la madre están en buen estado y tras el parto fueron llevadas a una instalación médica para su control y recuperación.
Según el Comando Aéreo estadounidense el vuelo con salida de Kabul había hecho una parada en una base en Oriente Medio y en el trayecto hasta Alemania la mujer empezó a sentir la inminencia del parto.
Ante la aparición de algunas complicaciones sanitarias el comandante de la nave, un Boeing C-17, decidió entonces bajar de altitud, para que la presión no perjudicara la intervención de los sanitarios a bordo y estabilizar las condiciones de la madre.
El parto se produjo en la bodega del avión, ya una vez aterrizado en la base estadounidense en Ramstein, con el apoyo de personal médico de esa instalación y tanto la madre como la pequeña están bien.