Inglaterra sufrió más de la cuenta pero finalmente clasificó a la final de la Eurocopa, en donde se medirá a Italia el próximo domingo.
El conjunto inglés derrotó 2-1 a Dinamarca, en un compromiso que se decidió en los tiempos extra, luego de que en los 90 minutos finalizó empatado a un gol.
Los daneses se fueron adelante en el marcador, al minuto 30 del compromiso, con un golazo de tiro libre de Mikkel Damsgaard.
Inglaterra logró el empate nueve minutos después, gracias a un autogol de Simon Kjaer.
Ya en el tiempo extra, al 104’, Harry Kane, tras fallar un penal bastante polémico, aprovechó el rebote y marcó el 2-1 definitivo.
La gran final de la Eurocopa se jugará el próximo domingo, 11 de julio, a las 2:00 de la tarde, en el estadio de Wembley (Inglaterra).