Real Madrid y Manchester City no defraudaron en el partido de ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones, al brindar un espectáculo digno de los planteles y los entrenadores que poseen.
Un carrusel de emociones y buen fútbol durante más de 90 minutos, en donde cada escuadra presentó sus argumentos de éxito y no se guardó nada.
Al final, un trepidante 3-3 en el estadio Santiago Bernabéu que deja la eliminatoria abierta de cara al compromiso de vuelta en territorio inglés.
Los primeros minutos fueron de mucho vértigo.
Manchester City se adelantó en el marcador mediante Bernardo Silva a los dos minutos, pero por la vía de las transiciones rápidas de defensa a ataque el Real Madrid consiguió reaccionar.
Rubén Dias (12′), en contra, y Rodrygo (14) concretaron los goles de la remontada del equipo de Carlo Ancelotti, que supo aguantar en su campo y, cuando recuperó el balón, mostró argumentos para herir al rival.
El elenco inglés, entre tanto, mantuvo la posesión, pero le costó ser lo suficientemente profundo y, además, no tuvo precisión y cedió ante el asedio del club ‘merengue’.
Para la segunda parte, Manchester City mantuvo su filosofía de manejar el balón, pero en esta ocasión fue más claro y, al mismo tiempo, se encontró con un Real Madrid que perdió agresividad en la marca y permitió los remates de media distancia.
Fue justamente por esta vía que el equipo de Pep Guardiola encontró la llave del gol, primero con Phil Foden, a los 66 minutos, y después mediante Joško Gvardiol, a los 71 minutos.
Dos remates certeros al borde del área que le dieron la ventaja a los ingleses, pero con el Real Madrid siempre hay que dejar la puerta abierta.
El ingreso de Luka Modrić le dio un aire nuevo al cuadro ‘merengue’, que pronto sacó su jerarquía para igualar las acciones con un golazo de Federico Valverde, a los 79 minutos.
Al final, un justo 3-3 que deja la definición para el compromiso de vuelta en Inglaterra.