Publicidad

La red de poder que tejió la primera dama en el Gobierno del ‘cambio’

Sus amigos ocupan algunos de los principales cargos del Gobierno, tiene bases en el Congreso y en el mundo político ya la ven como una presidenciable. Así se extiende su influencia.

El poder de la primera dama, Verónica Alcocer, se siente más allá de los pasillos de la Casa de Nariño. La pareja del presidente Gustavo Petro es, en sí misma, un actor político con influencia en el Gobierno y fichas en el servicio internacional, el comercio exterior, en las entidades públicas y hasta en el mismo Palacio.

Los amigos de Alcocer son más que asesores. A su cargo están entidades como el ICBF, al mando de Concepción Baracaldo, la oficina de la infancia del país que tuvo un presupuesto de $8,5 billones en 2022. Baracaldo es administradora de empresas y ha tenido experiencia en el sector público, pero su cercanía con la familia Petro-Alcocer no se dio precisamente en el mundo de la política, sino en sus casas cuando fueron vecinos.

Así se dio paso a una amistad que hoy la tiene al mando de una de las entidades más importantes de la arquitectura institucional colombiana, y que deja ver el especial interés que tiene la primera dama en los asuntos de infancia.

Aunque es de las más poderosas, la funcionaria más cercana a Alcocer es la española Eva Ferrer, a quien le asignó un cargo que está cerca de su despacho, pero también de la oficina presidencial de Petro. Ferrer es la consejera del Palacio para la Niñez y la adolescencia, un cargo que trabaja de la mano de la dirección del ICBF y de la misma Alcocer.

La sincelejana se puso dos banderas al llegar a la Casa de Nariño, la de los derechos de la mujer y la lucha por la infancia, y esas dos tareas se las designó a sus más cercanas amigas. El caso de Ferrer, sin embargo, es diferente.

Cuando este diario tocó la puerta del despacho de Alcocer para solicitar información sobre sus funciones como primera dama la respuesta fue que el trámite debía hacerse con Ferrer. ¿Una consejera de la niñez con encargos especiales para la primera dama?

La española, que se conoció con la familia presidencial cuando Petro y Alcocer viajaron a España durante su paso por la Alcaldía de Bogotá, no contestó las llamadas y los mensajes de este medio. Eso sí: es tal la confianza del Gobierno en ella que fue la encargada de asesorar a la líder política en sus tiempos de campaña.

En la Casa de Nariño hay un asiento reservado para otro de los amigos más cercanos a ella, el coreógrafo Adolfo Martínez, más conocido como “Nerú”. Él es el coordinador del gimnasio del Palacio, un nombramiento que desató críticas al funcionamiento de la burocracia en el Ejecutivo. A pesar de los cuestionamientos, se mantuvo en firme su designación.

Alcocer la diplomática

Así como la vicepresidenta Francia Márquez tendrá un ministerio a su medida, a Alcocer le están alistando un proyecto dentro del Ministerio de Relaciones Exteriores que encaje con su perfil: el de una mujer imponente y cercana a la gente.

El canciller Álvaro Leyva solo detalló que ella será un medio para consolidar el discurso del presidente, muy en la vía de la intención de Petro de tenerla como una de las piezas para aportar al “cambio”. Desde el Palacio de San Carlos afirmaron que ese proyecto ya está en construcción y, aunque sin que esté en marcha ella ya tiene influencia en la política exterior.

El caso más notorio fue su viaje como “embajadora en misión especial” por Reino Unido, Japón y Estados Unidos, donde asistió a las exequias de la reina Isabel II y del exprimer ministro de Japón Shinzō Abe. A esa lista se suma la visita a Noruega, donde el gobierno de Oslo le alistó una agenda especial para presentarle los programas sociales de ese país.

Y ese calendario de septiembre por el país europeo tuvo la encargatura de estudiar la minucia del sistema de protección noruego, uno de los mejores del mundo, ¿es la llave del mandatario para delinear las reformas sociales?

Así como los partidos tienen fichas en las embajadas –los verdes en la de Nicaragua con León Freddy Muñoz o los godos en la de Paraguay con Juan Manuel Corzo– la primera dama también tiene sus emisarios en el servicio exterior.

La embajadora de Colombia en Italia, Ligia Margarita Quessep, es abogada, experta en derecho internacional y amiga de colegio de Alcocer. Otro que es cercano a la sincelejana es el embajador en España, Eduardo Ávila, uno de los gerentes que tuvo la campaña de la Colombia Humana para las elecciones.

Más allá de lo diplomático, designó a sus emisarios en el comercio exterior. En los pasillos de ProColombia, la entidad que administra la marca país y las alianzas con empresas del globo, se comenta que su nueva presidenta Carmen Caballero es amiga de Alcocer.

Esa oficina tiene un presupuesto superior a los $150.000 millones, que le hace uno de los motores del Ministerio de Comercio para definir qué productos se exportan con la marca Colombia, una tarea preponderante para un Ejecutivo que quiere modificar la canasta exportadora del país.

Otra que está en la arquitectura institucional es la abogada y artista plástica Adriana Ramírez, militante del Pacto Histórico a quien no le alcanzó para llegar a la Cámara de Representantes ni en 2018 ni en 2022, pero las cuentas sí le dieron para convertirse en gerente de Artesanías de Colombia. Los cálculos de su nombramiento fueron hechos por Alcocer.

¿A dónde va tanto poder?

La primera dama hace correrías por el país como los ministros o la misma vicepresidenta, visita damnificados por las lluvias y las zonas de la “Colombia profunda” que quiere representar. Ya en campaña había tenido un rol similar con tarimas propias para mover votos por Petro, con quien lleva casi 23 años de matrimonio.

Es más que la pareja del presidente: está formando caudal político. Al punto que desde la contienda se empezó a especular sobre si ella podría tomar las banderas del mandatario para 2026. Es más, desde la oposición a Petro la ven como una ficha que podría entrar en la puja por la Casa de Nariño.

Para que se decante esa posibilidad faltan casi tres años, ¿tendría que renunciar a su rol de primera dama? En teoría, ella no es funcionaria pública, aunque sí representa al Estado, y en un país como Argentina ya se vio un caso similar con el fallecido Néstor Kirchner y la exmandataria y ahora vicepresidenta, Cristina Fernández.

Lo más inmediato son las elecciones regionales de 2023. La primera dama se mueve en los círculos de la política sucreña desde la cuna porque su abuelo paterno, Eustorgio Alcocer Navas, fue alcalde de Sincelejo. Eso sí: promoviendo las raíces políticas de una familia conservadora y lejana a la izquierda que hoy representan ella y su esposo Petro.

El mandatario sabe que en Alcocer hay potencial. De ahí que en sus primeras palabras como presidente afirmó que ella no estaba solo para acompañarlo a él en Palacio, sino para estar junto a las mujeres de Colombia “en su esfuerzo para salir adelante”.

En su primera hora ejerciendo como primera dama presentó tres proyectos de ley en la Secretaría del Senado enfocados en una agenda feminista para la paridad de género que aún no empiezan su trámite en el Congreso, pero que medirán su caudal político en el Capitolio.

Agregue a Q'hubo Bucaramanga a sus fuentes de información favoritas en Google Noticias aquí.
Publicidad

Otros artículos

Síguenos

0SeguidoresSeguir
4,304SeguidoresSeguir
6,840SuscriptoresSuscribirte
Publicidad

Últimos artículos

Publicidad
Publicidad