La posesión presidencial de Gustavo Petro tiene un golpe a su simbolismo. La espada de Simón Bolívar no podrá ser utilizada para la ceremonia porque el Gobierno saliente no autorizó su salida desde donde está resguardada por motivos de seguridad.
La espada era uno de los elementos insignia que quería utilizar el presidente electo para su investidura, pues esta fue robada por el M-19, la guerrilla a la que él perteneció, en 1974.
Se dice que el arma que perteneció al libertador estuvo en poder de ese grupo durante 17 años, hasta que en 1991 el mismo Petro la regresó a su sitio después de la desmovilización de esa guerrilla urbana.
El equipo de Gustavo Petro confirmó que, por ahora, la información oficial es que la espada no estará en la ceremonia.
