En la mañana de este viernes, 20 de septiembre, un avión aterrizó de emergencia en el aeropuerto Camilo Daza, que sirve a la ciudad de Cúcuta, en Norte de Santander, en un hecho que causó alerta porque puso en riesgo a los tripulantes y pasajeros de otro avión, que esperaban su turno en la pista para despegar.
Al parecer dos personas que iban en la aeronave de matrículas venezolanas portaban dos armas de fuego tipo pistola, pero ambos mostraron documentos validando el permiso para portarlas. Al parecer, eran miembros de la Guardia Venezolana.
Fuentes cercanas al caso le contaron al diario El Colombiano que el vuelo 9061 de la aerolínea Clic Air ya estaba en la pista, esperando la orden de la torre de control para su despegue rumbo a Bucaramanga, y justo en ese instante apareció sobre el cielo cucuteño el avión Cessna de matrícula YV3226, en la mañana de este viernes.
El Colombiano tuvo acceso a una grabación entre los pilotos del vuelo colombiano y la torre de control, en el cual quedó reflejado aquel momento.
— “Capitán, el tránsito al parecer está confundido, está al final cortapista, 1-6″, le informaron de la torre al piloto, indicándole que los venezolanos se dirigían a San Antonio del Táchira, una ciudad vecina a Cúcuta, en suelo venezolano.
— “¿Me confirma el motivo de la alarma?”.
— “Aeronave no autorizada en frecuencia San Antonio está aterrizando en pista 1-6 (…). Al parecer el piloto se confundió, procedía hacia San Antonio y aterrizó en el Camilo Daza”.
La situación generó tensión porque cuando las autoridades colombianas inspeccionaron la aeronave venezolana, encontraron que dos de sus pasajeros eran oficiales del Ejército y la Guardia Bolivariana, los cuales portaban armamento de dotación.
Finalmente, la Aeronáutica Civil autorizó su despegue, asumiendo que se había tratado de un simple imprevisto.
Este avión tipo Cessna con bandera venezolana y placas YV3226 aterrizó de imprevisto esta mañana en el aeropuerto Camilo Daza de Cúcuta con pasajeros militantes del régimen de Nicolás Maduro.
La detención ocurrió en un momento crítico tras la reactivación de sanciones impuestas por el gobierno de Estados Unidos contra el régimen venezolano, las cuales fueron motivadas por presuntos fraudes electorales ocurridos el 28 de julio pasado.
Gustavo Petro, presidente de Colombia, se refirió en redes sociales sobre este aterrizaje. “La información que tenemos sobre el aterrizaje del avión venezolano en Cúcuta es que se trata de una emergencia”.
Su llegada imprevista hizo que se activaran protocolos de seguridad nacional actuando según las normas de seguridad que están diseñadas para este tipo de circunstancias.
Finalmente, la Aerocivil concluyó que la aeronave cuenta con autorización para estar en el país, igual que sus tripulantes, a pesar de que un funcionario del alto Gobierno declarara que esta había entrado “sin permiso”, activando el Código Estela, un procedimiento diseñado para abordar el uso ilegal de aeronaves y garantizar la seguridad en el espacio aéreo.
Según informó una fuente a El Colombiano, los tripulantes de la aeronave habrían pedido inicialmente asilo político al aterrizar, pero al parecer cambiaron su versión horas después.