En Santa Marta, la comunidad se ha visto sacudida por una doble tragedia, marcada por la muerte de un joven que sufrió una descarga eléctrica mientras manipulaba su celular conectado a un tomacorriente.
La víctima, Moisés Ramos, de 21 años, único heredero de un prestigioso hotel en Playa de Los Ángeles, en Santa Marta dejó un vacío irremplazable en la vida de su padre del mismo nombre.
El padre, Moisés, de 62 años, quien se encontraba en proceso de recuperación tras una operación en los riñones, sufrió un impacto emocional abrumador con la pérdida de su hijo.
Familiares y amigos destacan la estrecha relación que había entre ambos, así como el constante esfuerzo de Moisés por brindar lo mejor a su hijo.
La noticia de la muerte de su hijo sumió a Moisés en una profunda crisis emocional, manifestada en su rechazo a comer y dificultades para dormir.
Durante el sepelio de su hijo, su estado emocional lo dejó visiblemente debilitado.
Preocupados por su salud, la familia observó cómo la resistencia de Moisés a seguir las indicaciones médicas complicaba su recuperación.
Trágicamente, el padre del joven falleció debido a complicaciones derivadas de la enfermedad que ya padecía, dejando a su esposa, María Isabel Arregoces, sumida en un luto abrumador tras perder a dos seres queridos en una misma semana.
