Los líos judiciales del norteamericano John Poulos no paran.
Mientras en Colombia enfrenta un proceso judicial por presuntamente ser el responsable del feminicidio de la DJ Valentina Trespalacios, en Estados Unidos un juez emitió orden de captura en su contra por un lío judicial que tiene con su esposa.
Así lo dio a conocer Ashely Poulos, la mujer con la que el norteamericano contrajo matrimonio en 2009 en ese país, y con quien tuvo tres hijos.
Sin embargo, la relación se acabó debido a que el sujeto «era muy posesivo» y hace cerca de dos años iniciaron los trámites para lograr la separación, mientras que él sostenía una relación con la DJ Valentina Trespalacios a quien, según la Fiscalía, habría asesinado.
“Ha habido mucha desinformación en torno a John y su familia aquí en Estados Unidos, y creo que es necesario que la información correcta sea reportada. John y yo nos casamos en 2009 y tenemos tres hijos increíbles. El mayor luchó contra el cáncer a los cuatro años. La relación entre John y yo era abusiva, lo que me llevó a solicitar el divorcio en 2021″, ha dicho la mujer en medios de comunicación de Estados Unidos.
Mientras Poulos estaba en una audiencia judicial en el búnker de la Fiscalía acusado de feminicidio agravado con dolo y ocultamiento de material probatorio, el juez que lleva su caso de separación emitió orden de captura por no responder por sus hijos debido a que todo su dinero lo habría transferido a un fidecomiso en el extranjero.
“John se ha representado a sí mismo como un ‘ciudadano soberano’ durante todo el proceso de divorcio, sin incurrir en gastos legales, pero haciéndome gastar miles de dólares en honorarios de abogados y tutores ad litem. A pesar de que se le ha ordenado pagar la manutención de sus hijos, se ha negado a hacerlo”, expresó Ashely Poulos.
El crimen de la DJ
El pasado domingo, 22 de enero, un reciclador halló en Bogotá dentro de un contenedor de basura el cuerpo sin vida de la DJ Valentina Trespalacios, de 23 años de edad.
El dictamen de Medicina Legal confirmó que la mujer murió por asfixia mecánica. Su principal sospechoso es el norteamericano John Poulos con quien sostenía una relación desde hacía nueve meses.
La Fiscalía le imputó los delitos de feminicidio agravado con dolo y ocultamiento de material probatorio, al señalarlo de ser el autor del crimen, pues fue la última persona con la que compartió la mujer antes del macabro hallazgo.
La Interpol lo capturaron en Panamá cuando intentaba salir hacia Turquía, donde se resguardaría de las autoridades colombianas.