En medio de la audiencia judicial en la cual la Fiscalía General de la Nación pediría a un juez de Control de Garantías cobijar con medida de aseguramiento a John Poulos, presunto responsable del crimen de la DJ Valentina Trespalacios, el sujeto hizo una advertencia y cuestionó el sistema judicial colombiano, que lo procesa por feminicidio agravado y ocultamiento de material probatorio.
Mientras se discutía el cambio de la traductora, quien pidió la renuncia para no continuar en la audiencia, el norteamericano manifestó que la justicia del país no brinda garantías.
“Para quien venga a Colombia, los derechos que se declaran no se cumplen. Esa es mi impresión en este punto”, dijo Poulos haciendo referencia a que desde el primer momento en el que fue capturado en Panamá su proceso judicial se ha manejado en español, idioma el cual no domina, pese a que la Fiscalía ha mantenido durante los tres días de audiencias a una traductora.
“En Colombia me dijeron que tenía derecho de llamar a un abogado, pero se me ha negado”, también sentenció.
Sus declaraciones también se dieron luego de que su abogado Martin Riascos presentara su renuncia irrevocable para seguir defendiendo a quien fue el novio de la DJ Trespalacios, argumentando que ha recibido amenazas en su contra por defender al norteamericano.
“El hecho de que él no haya podido conseguir un defensor de confianza por las razones que sean, o económicas, o porque no encontró un abogado bilingüe, manifestación poco creíble, el Estado le ha garantizado su defensa técnica a través de la defensoría pública, en todo momento ha estado acompañándolo por un profesional del derecho”, dijo el juez del caso, quien decidió suspender la diligencia judicial de este martes mientras se consigue una nueva traductora del ente acusador.
El crimen de la DJ
El pasado domingo, 22 de enero, un reciclador halló en Bogotá dentro de un contenedor de basura el cuerpo sin vida de la DJ Valentina Trespalacios, de 23 años de edad.
El dictamen de Medicina Legal confirmó que la mujer murió por asfixia mecánica. Su principal sospechoso es el norteamericano John Poulos con quien sostenía una relación desde hacía nueve meses.
La Fiscalía le imputó los delitos de feminicidio agravado con dolo y ocultamiento de material probatorio, al señalarlo de ser el autor del crimen, pues fue la última persona con la que compartió la mujer antes del macabro hallazgo.
La Interpol lo capturaron en Panamá cuando intentaba salir hacia Turquía, donde se resguardaría de las autoridades colombianas.
