Las lluvias de estos días, aunque suaves, no han pasado desapercibidas en Piedecuesta.
Por un lado está la emergencia ocasionada luego del arreglo que hizo la Piedecuestana de Servicios E.S.P. en la calle 8, por un daño de un collarín de 6 pulgadas, que causó una fuga de agua.
Pese a la señalización que hizo la empresa para evitar que los vehículos pasaran sobre el hueco -que sólo fue rellenado con tierra ya que aún no se puede pavimentar- la comunidad retiró los elementos y un bus de Metrolínea terminó atrapado.
Fueron aproximadamente 30 minutos en que el vehículo estuvo ahí, pero por fortuna, no ocasionó otro daño.
La Piedecuestana informó que el pavimento demora, pues hay que incluir el hecho en un contrato de emergencias.
Por otra parte, en el río de Oro por poco se genera un represamiento debido a un árbol que cayó y obstaculizaba el caudal.
Esta urgencia fue atendida por el Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Piedecuesta, para evitar una tragedia.
“Se emplearon motosierras para destapar la parte del río donde se estaba registrando el represamiento”, dijo el teniente Rafael Herrera, director de Bomberos Piedecuesta.
Los bomberos revisaron los caudales en La Quebrada Grande en horas de la mañana y el caudal estaba normal y sus aguas eran claras, en el casoo del caudal del Río de Oro, este sí había aumentado y sus aguas se encontraban turbias.
“Desde hace 2 días tenemos lluvias constantes, afortunadamente no han sido fuertes.
“Hemos tenido casos puntuales, incremento en los niveles de los ríos, pero no de manera extraordinaria, no hemos tenido emergencias de gran magnitud, en la zona occidental tuvimos desprendimiento de unas rocas, normal por el tipo de topografía y geología y también tuvimos un desprendimiento de ramas considerable que cayeron en el Río de Oro y que fueron atendidas por los bomberos”, dijo William Niño, de la oficina de Gestión del Riesgo.
El funcionario añadió que en los últimos días han adelantado actividades de limpieza, brigadas, talas y cortes de árboles y limpiando ríos, para evitar emergencias graves, pero no hay que bajar la guardia. Ayer en la tarde llovía fuerte en la zona.
