En Bucaramanga, muchos dueños de predios no parecen tener clara la diferencia entre el espacio público y el privado. Las razones: se han acostumbrado a construir o adecuar las mejoras de sus casas más allá de las líneas de demarcación oficiales o urbanísticas.
Algunos se toman los antejardines y levantan paredes en ellos como si fueran parte de las edificaciones; otros prolongan el área de parqueo de la casa y montan allí una venta de perros, un taller o construyen una pieza más de la vivienda; todos ellos sin autorización oficial. Incluso, diseñan montículos de cementos o ‘policías acostados’ frente a la vivienda para que los peatones reduzcan o aminoren sus pasos.
Tras un recorrido hecho por nuestros reporteros gráficos en varios puntos de la ciudad, se evidenció que en muchos sectores residenciales los vecinos ‘empotran’ estructuras, construyen escaleras y adecúan rejas sobre los andenes, sin importar que los antejardines cumplen una función pública y no se pueden privatizar.
De acuerdo con el Municipio, las infracciones más comunes son: levantar muros y escaleras sobre los andenes; construir por fuera de los alcances de las licencias oficiales; y encerrar áreas peatonales para acondicionar sobre ellas negocios.
Joaquín Augusto Tobón Blanco, secretario de Planeación Local, dijo que “este año hemos sellado múltiples obras que contravienen lo ordenado en Plan de Ordenamiento Territorial y están surtiendo el debido proceso en las inspecciones de policía de la Secretaría del Interior”.
“Es lamentable que deba llegarse a estas instancias debido a que algunos ciudadanos no cumplen las reglas ni las normas y tienen poca cultura ciudadana. Estos son actos de corrupción también y quienes incumplen la ley, ciudadanos o políticos, son corruptos”, añadió.
“El llamado es a que así como todos y todas exigen derechos también cumplan con sus deberes”, anotó.
“Nosotros, desde la Secretaría de Planeación, en el área de Control de Norma Urbana, hacemos permanentemente visitas en las que detectamos obras que, como en el caso de las imágenes que hoy muestra este diario, transgreden las normas contempladas en el POT”, argumentó Tobón Blanco.
“Una vez hecha la visita, elaboramos el informe técnico para ser enviado a la Secretaría del Interior, para que a través de las inspecciones de policía continúen con el proceso de multas y las posibles demoliciones dependiendo de la infracción”, añadió.
“Por otro lado, también se realizan visitas conjuntas con la Secretaría del Interior, denominadas RIMB, en las que el inspector de policía practica el sello de la obra de manera inmediata y continúa con el proceso de sanción”, puntualizó.