Cada vez que llueve en la capital santandereana, se genera una grave inundación que bloquea el paso deprimido del intercambiador vial Mesón de los Búcaros, a la altura de la Avenida Quebradaseca, tal y como ocurrió el pasado lunes festivo.
La situación, según lo consultado por esta redacción, no está relacionada con insuficiencias en la construcción del sistema de drenaje pluvial, como algunos ciudadanos lo manifiestan.
El problema, presuntamente, es más de tipo social, para el cual la Alcaldía de Bucaramanga y entidades competentes deberían tomar correctivos. Es decir, los sumideros están abarrotados de plásticos, ropa, zapatos, cobijas y hasta colchones que son elementos dejados allí por los habitantes de calle que han tomado estas estructuras como dormitorios o sitios de descanso.
La Empresa Pública de Alcantarillado de Santander, Empas, si bien atiende las emergencias que se presentan en la zona ante las intensas precipitaciones y el mal manejo de residuos, aclara que el mantenimiento preventivo no es de su competencia porque el sistema aún no le ha sido entregado por parte del Municipio.
El ingeniero Fabio García, asesor de Operación de Infraestructura de la Empas, manifestó que “el lunes estuvimos desde las 11:30 a.m. hasta las 3:30 p.m. realizando intervenciones”.
“Logramos destapar uno de los sumideros. Es necesario programar una jornada de limpieza para destapar el otro sumidero y garantizar que el sistema quede funcionando en su totalidad, pero por el alto flujo vehicular que se presenta en esta zona nos toca coordinar con la Dirección de Tránsito”.
Fabio García, asesor de Operación de Infraestructura de la Empas
El funcionario aseguró que tras la más reciente emergencia se sacaron entre dos y tres metros cúbicos de residuos. Una vez fueron retirados los elementos que conllevaron a que el sistema se colmatara, el agua empezó a drenar de manera adecuada.
“No tenemos reporte que en otro punto del área metropolitana de Bucaramanga se presente una situación similar o más grave. Sí tenemos eventualidades en barrios donde la capacidad del alcantarillado pluvial se rebosa por las constantes lluvias, pero cuando pasa la temporada lluviosa el sistema vuelve a su correcto funcionamiento”, indicó el ingeniero García Quiroga.
Iván José Vargas, secretario de Infraestructura de Bucaramanga, confirmó que efectivamente el sistema de alcantarillado de esta obra no ha sido entregado a la empresa de servicios públicos, pues apenas se avanza en el proceso de liquidación del proyecto.
“Estamos en la última fase de liquidación de esta obra que venía de dos administraciones anteriores. Empas siempre ha colaborado en el despeje de este sistema, pero el problema siempre será toda la basura que arrojan allí, así que se debe buscar un mecanismo que impida que esto siga sucediendo”, afirmó.
Según el secretario, la acumulación de agua sobre la vía no ha generado perjuicios sobre el pavimento, pero no se descartan daños si esto se sigue prolongando.