El ‘cholao’ es un postre típico proveniente del Valle del Cauca, específicamente del municipio de Jamundí. Su preparación requiere de hielo raspado y fruta picada, como banano, piña, papaya, fresa, entre otros. Adicionalmente se le agregan ‘melaos’ de distintos sabores y la tradicional leche condensada.
Leonor Sandoval es una bumanguesa, quien curiosamente nunca ha visitado Cali o Jamundí, pero asegura que sus ‘cholaos’ son los mejores del país. Su historia inicia en 1993 cuando en compañía de una familiar decidieron emprender un pequeño negocio de venta de helados y de frutas.
Con una experiencia de casi 28 años, el puesto de ‘cholaos’ de Leonor, ubicado en la calle 40 con carrera 31 en el barrio Mejoras Públicas, se ha convertido en uno de los más reconocidos de la ciudad.
El secreto para mantenerse durante tanto tiempo, según Leonor, se debe a que “constantemente mantengo actualizada mis recetas y eso me ha permitido llegar a las personas y cautivar sus paladares.
Este negocio de tradición familiar, que trae un poco de la cultura vallecaucana a la región, es una muestra de la diversidad gastronómica que podemos encontrar en las calles del área metropolitana.
Gracias a este negocio en el que además ofrece, waffles, granizados, frappés, raspados y jugos naturales, Leonor ha podido mantener a su familia y salir adelante a pesar de las adversidades y la difícil situación económica generada por la pandemia.
Para Leonor, “su producto ha pasado a tener un espacio muy importante en Santander, pues, al ser tan refrescante y al estar preparado con frutas frescas, a la gente le gusta mucho y se ha convertido en un postre muy tradicional”.
El sueño de esta santandereana es abrir otros dos puntos de venta y poder atender a muchas más personas.