La inauguración del Parque Recreativo o de la Familia en_La Cumbre, se convirtió en una gran oportunidad para las familias víctimas de la violencia que no tenían empleo.
Esto les sirvió para llegar al lugar con ventas ambulantes en las que ofrecen diferentes productos y poder vivir de ello.
Sin embargo, no todo ha sido color de rosa y han tenido problemas con otras personas que llegan al lugar “sin tener la necesidad de hacerlo”, por eso, decidieron organizarse y crear una asociación que no solamente los proteja, sino que les permita mantener el parque en perfecto estado, para no permitir acabar con los recursos de todos.
“Un señor viene de otro barrio, él es problemático, y pues nuestro propósito es que sólo trabaje gente del barrio.
“Nosotros con la Asociación de Vendedores del Parque de la Familia (Asoparques de la Familia) que ya es legal, tenemos personería jurídica, Cámara de Comercio, todo lo de ley, entonces, lo que buscamos es carnetizar también”, indicó Luis Hernando Mosquera, director de Asoparques.
Aunque reconocen que no tienen ningún permiso para trabajar, quieren hacer las cosas bien y por eso también se encargarán de conservar la infraestructura del parque y de recuperar las cosas que la comunidad dañe como en este momento que ya hay daños en el parque infantil.
“La mayoría de parques tienen su asociación, y ahí se busca que la gente no pelee, que no existan problemas y tratar de mantener el parque, por eso nos organizamos”, acotó.