¿Qué sentido puede tener un parque, si los niños no pueden jugar en él? Los habitantes del barrio Villanueva, en Piedecuesta, se hacen este interrogante cada que quieren salir con los más pequeños de la casa para que se diviertan un rato en el espacio que, se supone, es para ellos.
Sin embargo, al llegar al lugar, los juegos se ven ‘invadidos’ por jóvenes que se ‘divierten’ a su modo y no dejan nada bueno que desear para el ejemplo de los menores.
Un residente, quien por seguridad prefirió mantener su nombre bajo reserva, aseguró que esta situación se viene presentando desde hace varios meses y no han encontrado una solución definitiva.
“Todo este sector siempre ha tenido esa problemática, sobre todo por la quebrada de Villanueva… ahí se ve demasiado consumidor. Hay un parquecito donde los niños quieren ir a jugar y a veces les toca devolverse porque hay muchachos consumiendo y nadie los para de ahí”, dijo el denunciante.
Y por si esto no fuera suficiente, el ‘garrotero’ precisó que en algunas oportunidades se presentan riñas y la situación es mucho más peligrosa. “La juventud está perdida. Se ven en el parque de ocho a diez jóvenes… Algunos son de aquí, otros vienen de otros barrios, pero ha pasado que se pelean con cuchillos, se insultan, hay unas escenas muy alarmantes y cuando se llama a la Policía, vienen y los corren, pero cuando se van, los muchachos regresan”, añadió.
Buscando soluciones
Ante la problemática, Q’hubo se comunicó con Jairo Correa, Secretario del Interior de Piedecuesta, quien precisó que “por el momento cada Junta de Acción Comunal debe comunicarse con el cuadrante de su sector. Sin embargo, se está estudiando la posibilidad de mirar cómo se encierran esos sitios para que solo los niños puedan jugar o las personas puedan hacer ejercicio”.
