Con la puesta en marcha de un nuevo esquema operacional, decenas de buses convencionales fueron integrados desde la presente semana a las operaciones diarias de Metrolínea, con el objetivo de mejorar la prestación del servicio y ampliar la cobertura en diversos sectores del área metropolitana de Bucaramanga.
Hablamos de una esperanza que surgió para mantener el servicio y optimizar la operatividad del Sistema Masivo, que a principios de 2024 funcionaba con apenas 14 buses de los verdes. Ahora, fueron incorporados a las operaciones un total de 120 automotores.
Se trata de buses convencionales que pertenecen a empresa tradicionales de transporte colectivo. Unitransa, Cotrander, Villa de San Carlos y Transpiedecuesta aportan estas decenas de vehículos que ahora cubren diferentes rutas de Metrolínea.
Además de esta flota con la que ahora cuenta el Sistema Masivo, en próximos días se iniciarán mejoras en la red de recargas de tarjetas inteligentes y tareas de reparación en varias de las estaciones que fueron vandalizadas, informó en entrevista con Vanguardia Jhair Manrique, gerente de Metrolínea.
En el marco de las ferias de Bucaramanga, el Sistema Masivo dispondrá una ruta especial que se encargará de cubrir el trayecto entre Provenza y Cenfer.
“Hicimos una reestructuración del sistema”. Metrolínea
Las directivas de Metrolínea y de las empresas tradicionales firmaron convenios para hacer posible esta articulación y mejorar así el servicio del Masivo. Vanguardia conoció que en las últimas horas se iniciaron acercamientos con Transcolombia, con el objetivo de seguir fortaleciendo la operación.
Jhair Manrique, gerente de Metrolínea, informó que “hicimos una reestructuración de todo el sistema. Anteriormente teníamos 12 rutas con una cobertura cercana a los 100 kilómetros en el área metropolitana, y ahora tenemos 13 rutas con una cobertura superior a los 400 kilómetros”.
Con esta reorganización, la compañía prevé aumentar la cobertura un 30 % y reducir las frecuencias de las rutas, de 50 minutos de espera a menos de 10 minutos, según lo precisado.
“Algunas de las rutas que teníamos sigue, a otras se les amplió el trazado y también hay tres que son totalmente nuevas. Ahora tenemos una ruta muy conocida, la antigua Igsabelar, que actualmente se llama P14 (Limoncito – Terminal de Transportes – carrera 33 – Estación UIS)”, indicó Manrique.
Las otras dos rutas nuevas que se pusieron en servicio son: RDF (ruta directa Floridablanca) Parque Estación UIS – barrio Altamira, y la AP9 (Provenza – Udes, Ciudad Venecia).
Los usuarios pueden consultar y precisar el trazado detallado de cada recorrido en la página web www.metrolinea.gov.co, y redes sociales de la empresa.
“Quiero enviar un mensaje de tranquilidad a todos los ciudadanos: no nos preocupemos si se liquida o no Metrolínea, porque la liquidación del ente gestor no tiene que afectar la prestación del servicio de transporte masivo. Es decir, si Metrolínea se acaba el servicio tiene que seguir”, dijo el directivo de la empresa.
Se programan reparaciones en estaciones de Metrolínea
El Gerente de Metrolínea entregó otra buena noticia, relacionada con la recuperación de las estaciones y paraderos del Sistema Masiva. Conforme con lo indicado a Vanguardia, desde el presente semestre se iniciarán trabajos de reparación.
“Vamos a iniciar estos mejoramientos en las estaciones que son principales para el desarrollo de las operaciones diarias, en especial Cañaveral. Estos arreglos se realizarán bajo nuestras condiciones financieras, que como sabemos muy bien estamos en crisis”, señaló Manrique.
De acuerdo con lo explicado, se trata de una especie de ‘primeros auxilios’ para recomponer las estaciones vandalizadas. En estas tareas que se programan, por ejemplo, se reinstalarán paneles metálicos que fueron hurtados.
Los sistemas de validación y lectura de tarjetas, las taquillas para la recarga de pasajes y los sistemas de iluminación igualmente serían recuperados en el marco de estos trabajos.
Pero es importante dejar en claro que, por ahora, no se contempla una recuperación integral de las estaciones. Es decir, se intervendrán pero no quedarán como nuevas.
Solo quedan ocho estaciones de Metrolínea en servicio
Reparar a cabalidad las siete estaciones que se hallan en el territorio de Bucaramanga tiene un costo aproximado de $9.000 millones, precisaron las directivas de Metrolínea.
“Hemos logrado recuperar gran material que resultó hurtado y vandalizado. Con esto vamos a arreglar las estaciones, como el caso de Lagos. Desde la presente semana iniciaremos en Cañaveral. También vamos a iniciar trabajos con el Alcalde Jaime Andrés Beltrán y el Ministerio de Transporte, con el fin de obtener más recursos para arreglo de la infraestructura”, anunció el Gerente.
En otras palabras, la idea es que las estaciones principales del Sistema Masivo vuelvan a ser funcionales en el corto plazo.
“Se contempló todo el tema de iluminación, red de recargas, fachada y puertas, con los recursos que tenemos”, agregó Manrique.
El Sistema Masivo cuenta con 35 estaciones en el área metropolitana, incluyendo los portales. Actualmente están operativas solo ocho de estas estaciones, a pesar de los graves daños que registran. Estas edificaciones en funcionamiento serán las primeras que se intervendrán, según lo informado.
Entre las gestiones más importantes que se adelantan en el presente semestre, también se encuentran, según el funcionario, “en 15 días vamos a iniciar el mejoramiento de la red de recarga y les indicaremos a los usuarios los puntos habilitados. Por el momento, los conductores van a recibir los dos métodos de pago”.
