José Mendoza y Leonor García “nacieron prácticamente trabajando” así lo confesó su hijo mayor José Omar Mendoza García.
Quien vio cómo sus padres trabajaban incansablemente la tierra en el corregimiento El Pajuil, situado en la vereda La Capilla en Matanza, Santander.
En enero de 1998, la pareja campesina cambió la tranquilidad del campo por las amplias oportunidades de estudio que le ofrecía la ciudad a sus hijos.
“Mis padres querían que todos los 3 hijos tuviéramos estudio y nos formamos como profesionales” relata José hijo, un orgulloso pensionado del Inpec.
Una bella casa esquinera de dos plantas los recibió en la segunda etapa del barrio Portal Campestre de Girón. Tan pronto como la familia se mudó, se abrió el negocio de víveres en la primera planta.
Al puro estilo de la provincia, en la tienda bautizada como ‘ La Gran Parada’ todos los días se madruga a las 6:00 de la mañana hasta las 2:00 de la tarde y se vuelven a abrir las puertas dos horas después hasta las 9:00 de la noche. Eso sí, los domingos sólo se trabaja la mitad de la jornada.
Relevo familiar
El servicio del negocio siempre ha sido responsabilidad de José y Leonor. No obstante, hace seis años, José Omar se sumó al equipo y se ha ganado el cariño de los clientes con el paso de los meses.
Ahora doña Leo, apodo que se ganó por su mirada tierna y actitud dulce con la clientela, se dedica a tener en orden la casa ubicada en la segunda planta.
Las más de 20 canastas llenas de productos frescos procedentes de la Central de Abastos hacen que el espacioso negocio le ayude a desvararse aquellos días que ir a plaza no es una opción.
La gentileza y el buen humor son dos valores que se han transmitido de padres a hijos, prueba de ello es la excelente reputación con la que goza la tienda familiar. Tanto José, el hijo mayor, como sus hermanos Luz Amparo y Wilson sumaron su granito de arena ayudando en La Gran Parada de Portal Campestre.