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La calle 67a del barrio Bucaramanga se pintó de Navidad

Papa Noél, el árbol navideño y Olaf, de la película Frozen, son algunos de los personajes que se pueden ver plasmados en la calle 67a del barrio Bucaramanga.

Todos los años, el segundo festivo de noviembre es la fecha que utiliza la comunidad del barrio para reunirse en una jornada de sol a sol y embellecer sus calles con los colores de la Navidad. 

Los habitantes se toman muy en serio la tradición de pintar las calles, por eso duraron más de 12 horas pintando más de 10 figuras navideñas.

Este año, dicha jornada tuvo un aforo de 15 personas entre artistas, fieles ayudantes y hasta quien cocinaba algo para picar y beber. Entre ellos, destaca el maestro Jorge Enrique Romero quien es el artista detrás de los bellos diseños que adornan la calle 67a. 

Con una actitud entusiasta relata que “estuvimos a pleno sol, pero riéndonos y haciendo ambiente mientras echábamos las tres manos de pintura a cada muñeco”. 

Jorge Enrique ya no reside en Bucaramanga, de hecho, vive en la otra punta del área metropolitana: Bucarica/Floridablanca. Sin embargo, después de una cariñosa llamada por parte de la familia Acelas, ‘el rolo’, como es conocido por la comunidad del sector,  aceptó la invitación y alistó sus pinceles. 

“Con rifas y distintos eventos logramos reunir el dinero para costear las pinturas y demás materiales necesarios con el fin de conservar esta tradición”. Edwing Gómez, habitante del sector. / FOTO FELIPE JAIMES LAGOS.

El pasado 12 de noviembre a las 8 de la mañana y en frente de la tienda de doña Martha se citó la comitiva navideña. Acurrucados o directamente echados en plena calle, empezaron a esparcir los característicos colores rojo y verde de esta época del año. 

Mientras las parejas, los niños y demás pintaban bajo el rayo del mono, doña Dora Bueno iba repartiendo la gaseosa helada e incluso guarapito para algún adulto que necesitara buena hidratación. La ‘chef de la jornada’ comentó: “aquí en lo que uno pueda ayudar, pues se ayuda porque es con el fin de hacer que la calle se vea más bonita”.

“Ese día estuvimos pendientes de que todos no pasaran hambre y sed. Por eso les cociné con mucho amor para que pudieran hacer la tarea”. Dora Bueno, ‘La chef de la joranada’. / FOTO FELIPE JAIMES LAGOS

El barrio con más de 70 años es reconocido por su fuerte sentido de pertenencia y unión de su comunidad, así lo demuestra don Arturo Pinzón con sus palabras “gracias a Dios, siempre nos hemos puesto de acuerdo para no abandonar esta linda tradición y contamos con el fiel apoyo del ‘rolito’”.

“En los 25 años que llevo viviendo en este barrio, siempre se han realizado las actividades navideñas porque son tradición”. Arturo Pinzón, habitante del sector. / FOTO FELIPE JAIMES LAGOS.

Los más de 70 metros de la calle 67a y alrededores del barrio Bucaramanga saben vivir el verdadero significado de la Navidad, que no es más allá de las risas y los momentos de unidad sincera con los más allegados. 

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