Han pasado por lo menos 30 años desde que la comunidad de Lebrija espera la llegada permanente del agua. Durante este tiempo, el racionamiento se convirtió en parte de su diario vivir y muchos hasta afirmaban que perdían de a poco la esperanza de que el suplicio con el suministro alguna vez terminara.
Ayer, la noticia llegó: se dio inicio a la construcción del acueducto que llevará el líquido desde la capital santandereana, al municipio ‘piñero’.
Luis Carlos Ayala, primer mandatario municipal, aseguró que con este proyecto “se puede hablar de desarrollo, de crecimiento y de progreso en el municipio. Tuvimos que invertir más de 4.000 millones de pesos porque el proyecto estaba estancado, olvidado y era necesario hacerle muchas correcciones. Además, anteriormente se había invertido más de 20 mil millones y no podíamos permitir que se perdieran”.
Ayala precisó que el inicio de esta obra, quizá la más importante del municipio, beneficiará a cerca de 43.000 personas.
“El consumo diario en el casco urbano es de 35 litros por segundo y con el acueducto, vendrán 75 litros por segundo. Esto es posible tras el trabajo mancomunado con la Gobernación de Santander, la ESANT, Findeter, el Ministerio de Vivienda, AcuaLebrija y el municipio”, añadió el funcionario.
El recorrido
El agua que surtirá al municipio viene desde Bucaramanga, pasa por la calle 45, el sector de Chimitá y luego llega a Girón; ahí habrá una estación de bombeo que subirá el agua a San Pablo (Lebrija) y bajará a la Planta de Tratamiento de Agua Potable de ‘la capital piñera’.
Se estima que estos trabajos estén listos para el primer semestre del 2022 y que para esta misma fecha, los lebrijenses puedan olvidarse de los racionamientos que se realizaban cada cuatro días y que se intensificaban en cada temporada seca.
