Aprovechando el paso que había habilitado la comunidad para el paso provisional de los carros pequeños desde cuando se presentó el derrumbe en la vía Bucaramanga – Barrancabermeja, una vez la Ruta del Cacao retomó el arreglo de la vía se habilitó un paso para peatones.
De acuerdo con Robinson Pérez, comerciante y habitantes de la zona, el paso es peatonal y no se permite el tránsito de motos. Esto facilita el desplazamiento de los habitantes que viven en el sector.
Explica que a ese punto conocido como parador Limoncito llegan las busetas de Palonegro y la gente que necesita desplazarse a otros puntos pasa por el tramo peatonal y en el parador El Búcaro hay motos que llevan a los habitantes a los diferentes puntos de la vereda Lisboa.
Comerciantes afectados
De otra parte, Pérez dijo que debido al derrumbe de la vía los comerciantes de la zona se han visto muy afectados porque la vía sigue cerrada y pese a que hay un paso vehicular alterno por Paraguay, son muy pocos los vehículos que transitan.
Manifestó que las ventas se han reducido en un 80 % y tuvieron que prescindir de los empleados que se tenían porque son muy pocas las personas que llegan a los negocios.
Avanzan los trabajos
Hay que recordar que la Concesionaria Ruta del Cacao retomó desde el pasado martes las labores en la vía que de Barrancabermeja conduce a Bucaramanga, especialmente en el PR 42+470 al PR 42+580.
Las obras se adelantarán para avanzar con la contingencia y poder garantizar la seguridad de todos los usuarios que transitan por este corredor, además de poder restablecer en su 100 % el paso vehicular.
“Se recuerda que el paso vehicular se encuentra suspendido y el no acatar la medida afecta de forma crítica tanto la estabilidad del sector, como la ejecución misma de las actividades”, puntualizó la concesionaria.
De igual forma se recordó que para llegar a Barrancabermeja o a Bucaramanga se podrá tomar la vía alterna entre Bucaramanga – Ríonegro – San Alberto – La Lizama.