El Acueducto Metropolitano de Bucaramanga aclaró este jueves que el cambio de medidores de agua de los diferentes abonados es un proceso técnico que se ejecuta desde hace varios años. Su finalidad es garantizar la calidad de la medición del gasto real del líquido, y la calidad del servicio.
Al respecto, Alejandro Estrada, Gerente de Acueducto Metropolitano de Bucaramanga explicó a Vanguardia que “lamentablemente aún hay medidores con hasta 30 años de uso, que deben ser renovados porque terminan dificultando la prestación de un buen servicio.
Así mismo agregó que algunos medidores con los años registran fallas como no medir el gasto real, razón por la que a diario se adelantan pruebas técnicas en las diferentes zonas de Bucaramanga y el área metropolitana a modo de censo, para comprobar el funcionamiento de los medidores y su idoneidad, de esta manera se determina si es necesario el cambio, o no.
Si en su propiedad detectan que el medidor registra fallas, el gerente de Acueducto Metropolitano de Bucaramanga aseguró que la entidad le da opción de financiar el aparato a cuotas ajustadas al estrato socioeconómico. Teniendo en cuenta que por los materiales y demás características técnicas el medidor alcanza un valor de 250.000 pesos. El valor de la reposición del medidor es cobrado directamente al usuario, porque es un elemento que pertenece al inmueble.
Así mismo esta redacción también conoció que si el usuario desea hacer el proceso de cambio de forma independiente, puede hacerlo, siempre y cuando el medidor adquirido cumpla con los requisitos exigidos por el Acueducto.
