Durante todo este jueves 9 de noviembre se han adelantado las labores de rescate de los cuerpos de los cinco mineros fallecidos tras una explosión en una mina de carbón artesanal en el corregimiento de Plan de Armas, en Landázuri, Santander.
Los trabajos adelantados por el Grupo Ponalsar de la Policía,organismos de socorro, unidades de salvamento de la Agencia Nacional de Mineros y la comunidad en general permitieron rescatar a tres de las víctimas fatales.
Los mineros fueron identificados como César David Ardila Herreño, Luis Alfredo Gil Herreño y Eliberto Fontecha Nieves. Aún faltan por rescatar los cuerpos de Michael Andrés López y José Fabián Mora.
Todas las víctimas eran residentes de la vereda San Martín, en el municipio de Bolívar, y trabajaban como mineros en el corregimiento de Plan de Armas.
Así como avanza la recuperación de los cuerpos también se adelantan las indagaciones preliminares para establecer qué causó la grave explosión en la tarde del miércoles 8 de noviembre.
John Jaime Ruiz Macías, secretario del Interior, señaló que “acumulación de gases” dentro de la mina es la hipótesis que, por ahora, se investiga.
“Estaban trabajando y, al parecer, hay una acumulación de gases que es lo que hace que se realice esta explosión. Esa es la hipótesis inicial que hay hasta el momento, según lo que han indagado los cuerpos de socorro, Policía y Fiscalía”, dijo Ruiz Macías.
Sobre si la mina contaba con permiso para su explotación el vocero de la Gobernación de Santander señaló que “esta investigación la debe realizar la Agencia Nacional de Minería, quien entrará a revisar si esta labor la estaban realizando bajo un título acorde con la ley o en la ilegalidad”.
Vanguardia conoció que la mina había sido cerrada hace un año por las autoridades ambientales; sin embargo, exponiendo sus vidas algunas personas estaban trabajando en la extracción de carbón mineral.
Esta grave emergencia dejó también tres personas heridas que fueron llevadas al Hospital Integrado de Landázuri y después fueron remitidas a otros centros médicos de Santander.
Se trata de Bladimir Moya, de 22 años, Álvaro Aguilar, de 29 años y Esaú Niño Ropero, de 33 años. Ellas acudieron al llamado de rescate de la víctima y luego se vieron afectadas tras la inhalación de gases.
La fiebre del carbón
Las autoridades han establecido que en el municipio de Landázuri hay al menos cuatrocientas minas ilegales, que han generado la llegada de cientos de personas del interior del país y de nacionalidad extranjera.
“Esto se nos convirtió en un problema social. Acá llega gente de Boyacá, Valle del Cauca, personas de nacionalidad extranjera con la fiebre de trabajar en esas minas y eso nos ha dejado tragedias. Tenemos antecedentes de hechos lamentables como la masacre ocurrida el año anterior, también ha habido situaciones en las que menores de edad se han visto involucrados en situaciones lamentables; esto es un problema que se nos ha agravado y pedimos la intervención de la agencia minera y de las autoridades ambientales”, expresó hace un par de meses el secretario de Gobierno del municipio en mención, Jhonatan Riátiga Rueda a Q’hubo.
