A pesar de las políticas públicas que buscan erradicar la discriminación hacia la población Lgbtiq+ o comunidad sexualmente diversa, en Bucaramanga, por ejemplo, las cifras de violencia de género continúan en aumento.
Mientras que desde la Alcaldía se organizan diferentes actividades para generar conciencia sobre la libre elección de la sexualidad, en la misma Secretaria de Desarrollo Social ven con preocupación las estadísticas de violencia contra quienes decidieron tener una sexualidad diferente a la heterosexual.
Según reporte de esta cartera, desde enero de 2022 y hasta el 25 de mayo pasado, en la capital santandereana se han registrado 141 casos de violencia contra esta población, de los cuales 49 han sido hechos entre familiares.
Según el secretario de Desarrollo de Bucaramanga, Jorge Neira, en la ciudad la población que más ha sido víctima de violencia y discriminación han sido las mujeres transgénero, a quienes en diferentes establecimientos comerciales han obligado a ingresar a los baños del género con el cual no se identifican. Además, no les aceptan el documento con el género anterior al que se sienten representadas.
De igual forma, afirma el funcionario, los hombres homosexuales también han sido los que más han recibido el rechazo, incluso dentro de sus mismos núcleos familiares.
Por su parte, desde la Fundación Compaces tienen un subregistro de cuatro mujeres trans que han sido agredidas en 2023 por miembros de la Policía Nacional en medio de diferentes operativos.
“Las mujeres trans viven la situación más difícil. Son víctimas de las autoridades, la Policía y hasta del microtráfico”, afirmó
Diego Torres, miembro de esta fundación.
Entre sus estadísticas, también señaló el caso de un menor de edad que fue víctima de bullying en la ciudad, y con el cual tuvieron que buscar ayuda de la Mesa Lgbtiq+ de la Alcaldía de Bucaramanga, de la Policía y el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, Icbf.
Estrategias en la Alcaldía
Seguramente mientras usted está leyendo este artículo en algunas de las vías de la ciudad se está celebrando el Prisma Pride Festival, un evento organizado por la administración municipal y con el cual se le quiere generar conciencia sobre la diversidad de género en el mes del Orgullo.
De igual forma, desde la Secretaria de Desarrollo Social se adelantan dos estrategias para erradicar la violencia contra la población sexualmente diversa.
La primera línea es la de ‘Círculos de palabra’, la cual está enfocada en hablar con grupos de padres sobre el proceso de transformación.
Según Jorge Neira, secretario de Desarrollo, en uno de esos encuentros dos adultos de 60 años decidieron aceptar su identidad de género sin temor a los prejuicios.
Además, está la metodología de ‘Diversidad al barrio’, una estrategia la cual es liderada por miembros de esta secretaria quienes van a las comunidades a conversar sobre la población Lgbtiq+.
En está línea, por ejemplo, una mujer relató el caso de su nieta, a quienes sus papás la vieron darse un beso con otra mujer y expulsaron de su casa.
“Era una joven de 16 años a quienes sus papás botaron de la casa y su abuela la acogió. Nosotros la acompañamos en ese proceso”, dijo Neira.
Por último, en este mes se quiere iniciar un acompañamiento a padres de familia que aún no aceptan las orientaciones sexuales diversas de sus hijos.
“A veces no pensamos que ese proceso de aceptación puede ser muy duro para los adultos por sus conductas conservadoras”, afirmó el funcionario.