Mercar en una plaza siempre será un privilegio para el cliente. Allí además de las comodidad del servicio y los precios, encuentra calidad en los productos.
Q’hubo visitó el centro de acopio de Piedecuesta, donde todos los días se ve mercado fresco y gran variedad.
Y de esa diversidad que busca el cliente encontramos el puesto de Yuri Carolina Navas y sus condimentos D’Juncal. Un proyecto familiar que desde hace cuatro décadas está dentro de los comerciantes de la zona.
“Vendemos todo lo que son especias, los derivados de los condimentos, finas hierbas, productos naturales, mezclas para carne, pescado, pollo, todo tipo de carnes se le hace su adobo específico”.
“También comercializamos frutos secos (almendras, nuez, uvas, maní y semillas). Hay mucha variedad de precios, siempre buscando la economía del cliente, ya sea al detal o por cantidad”, manifiesta Yuri.
Entre los productos cárnicos está el puesto de Distri NevaLac de Beatriz Rocío Pérez. Ellos comercializan salchichas, jamón, chorizo, cábanos y lácteos con quesos de todo tipo y para combinar las salsas por kilos y galones.
“Los precios han bajado y eso le gusta al cliente. Es una buena época para comprar lo que comercializamos”, dice.
Entre la venta de proteína están: Alex Javier Vázquez, que lleva 10 años vendiendo carne de res y Graciela Navas con las víceras. Esta semana el precio se mantiene estable en este producto en todos sus derivados.
Finalmente, Emperatriz Cáceres es la reina de las cocinas con su producto estrella el sancocho de bagre.
“Caldo de costilla, chanfaina, caldo de carne, mute, picos sudados, pollo, sobrebarriga. Desde $5.000 usted puede encontrar un manjar de estos”, puntualiza esta mujer, que desde muy niña está en esta plaza.
