Un polémico contrato para adquirir raquetas de tenis por un valor superior a los $4 millones cada una, y bolas para ese mismo deporte por $260 mil, tiene en líos a varios funcionarios del Indersantander, a quienes la Procuraduría General de la Nación les abrió investigación.
La decisión del Ministerio Público va dirigida a Pedro Belén Carrillo Cardenas, quien salió de la dirección de este instituto la semana pasada en medio de cuestionamientos, y de la asesora jurídica Mayra Alejandra Téllez Romero.
«En el contrato celebrado el 6 de mayo de 2022 entre Indersantander y la Corporación Soluciones Técnicas Agropecuarias y Ambientales (SOTEA) por cerca de $500 millones, se investigan supuestos sobrecostos en la adquisición de raquetas de tenis por valor de $4’000.000 cada una, y bolas para la práctica del mismo deporte por un valor unitario de $260.000», afirmó la Procuraduría.
Para el Ministerio Público también será objeto de investigación si el Indersantander evadió, en medio de la polémica contratación, la Ley 80 de 2002.
«La Procuraduría Regional de Instrucción de Santander busca determinar si los funcionarios causaron detrimento al patrimonio público pues, de acuerdo con la noticia publicada en un medio de comunicación digital, en el mercado la raqueta más costosa está en un rango de $1’200.000, y el tarro por tres bolas en $40.000 en promedio», puntualizó.
Con la lupa de la Contraloría
La semana pasada, la Contraloría General de Santander, en cabeza de Blanca Luz Clavijo, abrió proceso de responsabilidad fiscal en contra de este instituto deportivo por los mismos hechos en mención.
En la decisión del órgano de control fiscal se pidió apartar a Pedro Belén Carrillo de la dirección del Indersantander. Este pedido fue acatado por el gobernador de Santander, Mauricio Aguilar, quien minutos después de conocerse la decisión de Clavijo pidió la renuncia.
«Indersantander es un instituto descentralizado, autónomo en sus decisiones administrativas y contractuales. Como Gobernador debo velar por los recursos del departamento y evitar el detrimento en las finanzas. Por eso, pedí la renuncia del hasta hoy director Pedro Carrillo», afirmó el mandatario departamental en su cuenta de Twitter.
La Unidad Investigativa de Vanguardia, diputados y veedoresdenunciaron que en el Indersantander habría un posible carrusel de contratos, los cuales se adjudicaban a uniones temporales y personas que, al parecer, carecían de idoneidad para la ejecución.
En un informe esta redacción confirmó que una corporación agropecuaria del Chocó terminó ejecutando en Santander un millonario contrato para entregar raquetas de $3.8 millones y bolas de tenis de $280 mil pesos cada una, en tan solo uno de los cinco contratos por más de $2.700 millones, suscritos este año por el Indersantander con corporaciones de dudosa idoneidad.