Armando ‘El Piripi’ Osma no ocultó la tristeza por su salida del Atlético Bucaramanga.
En diálogo con Q’hubo sostuvo que le faltó eficacia al equipo; aclaró que en ningún momento sintió que ‘le hicieron el cajón’; y también reconoció que “hay cosas de las que me arrepiento”.
“Fue un momento de tristeza, no pensaba que se venía, sufrimos varias veces esa situación de que se tomara esa decisión de una salida y no terminar el torneo, pero fueron más los momentos alegres”, dijo Osma al ser consultado por la manera como tomó la salida del elenco ‘Leopardo’, al que dirigió en 34 partidos por la Liga, con saldo de 14 triunfos, siete igualdades y 13 caídas, para un rendimiento del 48,0%.
A la hora de la despedida del plantel, aseguró que “simplemente les agradecí, porque si Bucaramanga hizo algo importante fue por la comprensión de ellos y los invité a que siguieran adelante y les dije que estoy a su disposición para aconsejarlos”.
¿Hubo ‘cajón’?
En algunos medios de comunicación y también en sectores de la afición se habló de que los jugadores propiciaron el cambio de timonel, pero ‘El Piripi’ los desmintió al afirmar que “jamás pienso eso, jamás. Qué es hacer el cajón, es jugar para perder y yo no vi a mis jugadores jugar para perder, contra Junior fuimos mejores, también contra Águilas, pero nos faltó ser eficaces, y así es el fútbol”.
De las críticas de la prensa también indicó que “siempre he identificado cuáles son las críticas de las que no sale nada positivo, uno conoce a las personas, al positivo y al negativo; hay gente que se queda con lo negativo y en el fútbol hay que tener madurez para aceptar la crítica y el elogio. Uno tiene que ser el mismo cuando gana y cuando pierde”.
El orientador bumangués, que de momento confirmó que no ha recibido ofertas de otros clubes, fue enfático en esos dos cotejos, contra Águilas y Junior, que marcaron su paso al costado.
“En Bucaramanga construimos algo, teníamos todo en la mesa para ganar, porque pensamos que íbamos a vencer a Águilas y a Junior, y los jugadores fueron a buscarlos, pero no se pudo y eso hace parte del juego, porque fuimos superiores pero no marcamos”, afirmó el exestratega búcaro.
Para nadie es un secreto que las incorporaciones del segundo semestre no han llenado las expectativas, al punto de que un jugador como Kevin Pérez, por ejemplo, no ha podido reemplazarse y por ese sector el club ‘amarillo’ ha perdido volumen de ataque.
Al respecto, el que fuera uno de los socios ideales de Carlos ‘El Pibe’ Valderrama en el Cali de la década de 1980, aseguró que “el proceso de contratación es el más difícil porque el mercado a mitad de año lleva la dificultad de que la mayoría de jugadores tienen contrato y los que no, llevan meses sin entrenar y jugar. Uno siempre piensa que la contratación es la que resuelve el problema y muchas veces no es así, porque también hay que ver cómo se adapta el jugador al nuevo plantel”.
Precisamente, de las cosas que le quedan marcadas es que no pudo armar el equipo y si en un futuro se presenta el regreso, “volvería para empezar el torneo, para escoger la nómina, porque el equipo lo armo a mi estilo, con un juego vertical, mirando la calidad de los futbolistas. Yo entro al Bucaramanga con un equipo contratado y me voy con el mismo equipo contratado. Yo no pude hacer mi equipo”.
Los mejores momentos
Para Osma, el mejor momento del cuadro ‘Leopardo’ fue en los cuadrangulares semifinales del primer semestre, donde se quedó “con la espinita el día que llenamos el estadio contra Atlético Nacional; jugamos muy bien y perdimos 1-0 y me dolió porque sabía que podíamos ir a la final”.
‘El Piripi’, quien confía en que sus exdirigidos logren la clasificación en las últimas cuatro jornadas, “la deuda más grande, es la parte ofensiva, es como les digo yo a los jugadores, el delantero que no marque gol está sin foco. Tenemos que buscar la forma de que los jugadores marquen goles, que existan alternativas, porque a veces dependíamos mucho de Dayro Moreno, pero hay que tener más jugadores que marquen goles”.
Finalmente, de Jorge Ramoa, quien asume de manera interina al Atlético, dijo que “es un hombre de la casa, es un estandarte del Bucaramanga, le deseamos lo mejor, el equipo está bien entrenado y ojalá que tengan ese contagio emocional para ganar y que logren los mejores resultados, porque estoy convencido de que los jugadores no lo van a hacer quedar mal, ni a él, ni a mí”; y al momento de la autocrítica indicó que “me arrepiento de muchas cosas, he cometido errores, situaciones de juego, cosas que he dicho, de pronto no haber llamado a un jugador en un momento difícil, cosas así; yo cometo errores, soy humano”.