Según la iniciativa de la representante verde, Catherine Miranda, las iglesias que son reconocidas por el Ministerio del Interior y la ley, tendrán que pagar un impuesto de renta del 20%, pero será por aquellas actividades que no tengan nada que ver con la actividad religiosa.
Según el artículo presentado, dice que: “No están gravadas con el impuesto sobre la renta y complementarios las iglesias y confesiones religiosas reconocidas por el Ministerio del Interior o por la ley, respecto a los ingresos provenientes de actividades asociadas al oficio religioso, al culto, al rito, a prácticas que promuevan el apego de los sentimientos religiosos en el cuerpo social, o actividades de educación o beneficencia realizadas bajo la misma persona jurídica”.
Es decir que todas las actividades que sean ajenas a su fin misional y vocaciones, deberán sin excepción, pagar un impuesto de renta del 20%.