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Pastor evangélico fue asesinado por sicarios

“Recordarte como lo que fuiste, un hombre sencillo, humilde, predicador del Evangelio, trabajador incansable que daba su sustento por los demás. Los momentos vividos fueron experiencias para mí. Mi pastor y mi amigo, siempre te recordamos en mi familia, en ese lugar donde llegaste un día a servirle a Dios y donde nos conocimos. En […]

“Recordarte como lo que fuiste, un hombre sencillo, humilde, predicador del Evangelio, trabajador incansable que daba su sustento por los demás. Los momentos vividos fueron experiencias para mí. Mi pastor y mi amigo, siempre te recordamos en mi familia, en ese lugar donde llegaste un día a servirle a Dios y donde nos conocimos. En memoria de Salvador Zapateiro”.

Con mensajes como ese despiden en las redes sociales, en especial en Facebook, al pastor Salvador Zapateiro Mercado. Él es el hombre que asesinaron de cinco balazos en una tienda del sector Las Palmeritas, en el barrio Las Palmeras, mientras veía el partido de fútbol entre las selecciones de Colombia y Ecuador en el estadio Metropolitano de Barranquilla, por un cupo a las eliminatorias del Mundial 2026.

El asesinato de Zapateiro, de 47 años, oriundo de Cartagena y padre de tres hijos, ocurrió a las 7:30 de la noche del martes 19 de noviembre, en una tienda de esquina conocida como El Vendaval, en toda la Manzana 40.

Una hermana de la víctima le confirmó a El Universal en la mañana de este miércoles que Salvador, además de ser pastor de la iglesia Pentecostal en el barrio Los Alpes, trabajaba como latonero en un taller de mecánica de vehículos que está cerca de la tienda donde ocurrió el atentado criminal.

El asesinato del pastor Salvador Zapateiro ocurrió exactamente a las 7:30 de la noche del martes, mientras llovía y jugaban las selecciones de Colombia y Ecuador.

La familiar precisó que luego de trabajar, a eso de las 6 de la tarde, y en vista que llovía fuertemente, Zapateiro y varios de sus compañeros se pusieron a ver el juego entre Colombia y Ecuador. Ninguno de ellos estaba ingiriendo licor, anotó la hermana del pastor.

En medio del partido, y mientras Salvador observaba el cotejo, aparecieron los dos sicarios en moto. Uno de ellos, el parrillero, se le acercó por la espalda y le disparó a quemarropa y sin mediar palabras.

Testigos dicen que la víctima recibió cinco impactos, la mayoría de ellos en la cabeza. Su muerte fue en el acto. El cuerpo quedó sobre la silla donde estaba sentado viendo el partido, junto a una mesa. En sus manos quedó su bolso de trabajo.

“El día martes 19 de noviembre, a las 7:25 p. m., se presentó el homicidio de Salvador Zapateiro Mercado, de 47 años de edad, quien resultó lesionado por arma de fuego, falleciendo en el lugar de los hechos. El occiso se encontraba en la terraza de una tienda de abarrotes, cuando llega un sujeto a pie y le dispara. La Policía Nacional y la Fiscalía General de la Nación investigan los hechos para dar con la captura de los responsables”, señala el reporte que la Policía Metropolitana entregó sobre este hecho de sangre.

¿Por qué mataron al pastor?

Zapateiro Mercado, dice su hermano, siempre estuvo entregado a la vida religiosa. Su congregación la comenzó en una iglesia en Amberes y luego se unió a Iglesia Pentecostal Unida de Colombia.

Durante un tiempo fue pastor en la Iglesia Pentecostal de Berastegui, un centro poblado del municipio de Ciénaga de Oro, en el departamento de Córdoba, y de donde es oriunda su esposa y la familia de ella. Luego de regresar a Cartagena, hace unos años, Salvador se unió a la iglesia Pentecostal en el barrio Los Alpes.

En la actualidad, Salvador estaba viviendo con los familiares de su esposa en el barrio Piedra de Bolívar. Su pareja está en estos momentos de viaje por temas laborales y sus hijos residen con sus abuelos maternos en Córdoba.

“Mi hermano era un hombre sin problemas ni amenazas. Una persona muy comprensiva, colaboradora, servicial, muy pasiva. Él solo entró a la tienda porque estaba lloviendo y se quedó viendo el partido. No tenemos idea de qué pasó, yo me enteré cuando estaba en mi casa y me avisaron. Cuando fui al sitio, ya habían realizado el levantamiento”, le manifestó la familiar a El Universal.

“Mi pastor, fuiste una gran persona; en pocas palabras para mí fuiste el mejor y cómo olvidarte sí momentos hermosos pasamos todos a tu lado. Con el poco tiempo que duraste acá nos demostraste que siempre hay que ser positivos, no importa las circunstancias por las que estemos pasando. Nunca te olvidare Salvador Zapateiro, dejaste un gran vacío en nuestros corazones”, dice otro de los mensajes hacia el pastor asesinado en Cartagena, en medio de un atentado perpetrado por sicarios en moto.

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