Con las primeras luces del amanecer, Anderson Plata Segura no se encontró con todas las posibilidades que trae un nuevo día, pues antes de que comenzaran el ajetreo de la ciudad sufrió un imponente choque en la vía que conecta a Barrancabermeja (Santander) con Yondó (Antioquia).
‘Peque’, como le dirían de cariño sus allegados, iba al mando de una motocicleta Pulsar con placa DQV-15D, haciendo un recorrido por el puente de Caño Rosario.
Sin embargo, hacia las 5:45 de la mañana – cuando casi terminaba de atravesar el puente – su rumbo se desvió e invadió el carril contrario por donde transitaba un automóvil blanco de placas CFH-855.
El impacto fue totalmente de frente; su rostro y cuerpo fueron estremecidos contra las latas y el vidrio panorámico del carro, mientras su vehículo de dos ruedas quedó prácticamente incrustado en la defensa.
Todo el que pasaba por ese punto y observaba los destrozos en la moto y en el automóvil podía percibir la gravedad de las heridas con las que había quedado el motorizado.
‘Peque’ cayó sobre el pavimento con el rostro enrojecido por las lesiones y sin rastro de consciencia.
En su ayuda llegaron los uniformados del Cuerpo de Bomberos, quienes lo valoraron y procedieron a inmovilizarlo para llevarlo en ambulancia hacia un hospital.
“En el carreteo se le practicaron maniobras de RCP (reanimación), pero antes de llegar al centro asistencial el paciente no reaccionó y los médicos confirmaron que llegó sin signos vitales”, explicó uno de los rescatistas.
Inicialmente no se sabía de quién se trataba, pues según las autoridades el joven no llevaba consigo sus documentos de identidad.
Pero con el correr de la voz por el siniestro, las placas y el tipo de moto fueron orientando sobre el nombre de la víctima y los seres queridos de ‘Peque’ confirmaron que lo habían perdido para siempre.