Ángela Hernández es, quizá, la mujer más recordada en la política santandereana y así pasará a la historia, no solo por su aspiración a la Gobernación departamental, sino por las diferentes luchas que emprendió en diferentes escenarios sociales y políticos.
La carrera de Hernández en este mundo de la política inició desde muy temprana edad.
Tenía a penas ocho años cuando hizo su primera aparición en público. Fue en Cenfer, donde se reunieron los liberales de la región, luego de que Horacio Serpa Uribe perdió el primer intento por llegar a la Presidencia de la República.
Para ese entonces, su padre Óscar Hernández, quien el pasado 13 de marzo buscó llegar a la Cámara de Representantes, era concejal de Floridablanca ondeando el ‘trapo rojo’.
«Quiero hablar», dijo Ángela y le dieron la palabra.
«Yo no podía votar, pero me duele que usted haya perdido. Si yo hubiera podido votar, hubiera votado por usted…», dijo Hernández, tomando de la mano a Serpa Uribe.
Ángela acompañó a su papá a varias de las sesiones que él tenía en el Concejo de Floridablanca. Conoció, desde muy pequeña cómo funcionaba el mundo de los proyectos de ley desde una plenaria.
Fue designada como niña concejal, para después pasar a ostentar el cargo de niña diputada.
Su llegada al Concejo
En 2012, cuando Ángela Hernández cumplió los 21 años se postuló como candidata al Concejo de Floriblanca, luego de obtener el aval del Partido de la U, una de las fuerzas políticas más grandes que ha tenido Colombia en los últimos años.
En dichas elecciones alcanzó 700 votos y no pudo entrar al cabildo. Sin embargo, en diciembre de ese año, la Procuraduría suspendió a 19 concejales por la aprobación de una prima técnica al entonces alcalde de ese municipio, Eulises Balcázar Navarro.
Así las cosas, Ángela pudo llegar al Concejo siendo la concejala más joven del municipio y convirtiéndose este en su primer cargo de elección popular.
De concejala a diputada
Mientras Ángela se graduaba como abogada y hacía parte de una iglesia cristiana de Bucaramanga se postuló como candidata a la Asamblea de Santander y con 15.286 alcanzó curul en esta corporación.
Lideró en la región las marchas contra la ideología de género y la campaña del ‘No’ contra el plebiscito de los Acuerdos de Paz, bajo el aval de Álvaro Uribe Vélez. Su campaña siempre se centró en la “defensa de la familia y los valores cristianos” en los que coincidió en muchos escenarios con el exprocurador Alejandro Ordóñez. Los dos impulsaron un referendo de firmas “por papá y mamá” donde se condenaba de manera tajante la cartilla de educación sexual que promovía el Ministerio de Educación.
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Otras candidaturas
En 2019, cuando se iban a dar las elecciones regionales, Ángela Hernández postuló su nombre como precandidata a la Alcaldía de Floridablanca; sin embargo, dicha aspiración no prosperó.
Pero su interés por seguir en los escenarios políticos no se detuvo. Con una coalición de partidos se postuló como candidata a la Gobernación de Santander y emprendió una carrera por ser la primera mujer al frente de la administración departamental.
En esa jornada electoral Ángela alcanzó 215.680 votos, siendo la tercera mayor votación después de Mauricio Aguilar y Leonidas Gómez.
Con aspiración al Senado
Luego de que Ángela Hernández saliera de los primeros procesos médicos y de lograr una estabilidad en su salud, la exdiputada santandereana sonó en septiembre de 2021 como posible candidata a la Cámara de Representantes por la región.
Para la época, Hernández le confirmó a esta redacción que sí existió la propuesta, pero que estaba indecisa debido a que por varios meses estuvo alejada del panorama político y electoral.
Sin embargo, luego se conoció que la presidenta del Partido de la U, Dilian Francisca Toro, le ofreció ser la cabeza de lista al Senado por esa colectividad.
Su recaída y su estado de salud le impidieron continuar con esa carrera que logró consolidarla como una de las mujeres políticas más influyentes el departamento de Santander.
